"Pesesín" inicia una nueva vida en el Acuario de Gijón. La carpa dorada, una de tantas de las que se regalan a los niños cada año, vivía en casa de la niña gijonesa Yurena Sabio, de 16 años, pero unas vacaciones escolares en las que no tenía a nadie con quien dejar a "Pesesín", decidió colocarlo en un lugar visible del portal de su edificio con un listado para que los vecinos se organizaran para cuidarlo en su ausencia. Lo que empezó como un simple gesto muy ingenioso, acabó convirtiéndose en viral. Tuvo tanto éxito, que hasta la Policía Nacional lo tomó como ejemplo en un tuit para concienciar contra el abandono de animales, argumentando que siempre hay una alternativa. La implicación de los vecinos sorprendió incluso a la niña. Sus vecinos, que además dejaron a "Pesesín" nadar un rato en el lavabo, le dieron alas en las redes sociales. "Cuando volví... 'Pesesín' era famoso", publicó su dueña en su cuenta de Twitter a modo de agradecimiento.

Ahora Yurena ya no puede hacerse cargo de Pesesín y lo ha llevado al Acuario de Gijón. En esta ocasión, y excepcionalmente, el Acuario ha aceptado la donación. Y "Pesesín" va a estar cuidado 24 horas al día por profesionales que se encargarán de su bienestar. El animal pasará unos días en cuarentena, donde la veterinaria y el equipo a cargo vigilarán que esté totalmente sano. Y posteriormente pasará a la exposición.

"Pesesín" se suma así a los más de 4000 ejemplares que habitan en el Acuario gijonés, y disfrutará de sus magníficas instalaciones. Estas navidades todos los niños asturianos que pasen por Mercaplana recibirán un pase anual gratuito para visitar a "Pesesín" en las instalaciones de Poniente cuando ellos deseen.

La simpática carpa nunca había estado tan acompañada.

Y aprovechando esta circunstancia desde el Acuario, justo en estas fechas, quien resaltar la problemática que supone el abandono de mascotas regaladas. "Un animal debe ser fruto de una meditada decisión familiar y, tenerlo en casa es adquirir una gran responsabilidad. La familia aumenta con un ser vivo que necesitará cariño, compañía, cuidados y educación. No son juguetes", advierten sus responsables, quien animan a "adoptar, no comprar. Hay miles de asociaciones en España con animales deseosos de encontrar una familia", concluyen.

La dueña de "Pesesín", quien llegó incluso a establecer un cuadrante para que sus vecinos supieran lo que tenía que comer, justificaba así su acción inicial de compartir el cuidado del animal: "Iba con mis padres a hacer un viaje fundamentalmente en coche por la zona de León y Galicia. Mis padres me avisaron unos días antes y me dijeron que hiciera lo que pudiera con el pez".