Puente festivo, tiempo para tomarse un merecido descanso, un día de relax sin las ataduras de la semana de trabajo. Y para disfrutarlo, un plan sin salir de casa. ¿Qué les parece un vuelo alrededor de uno de los enclaves más singulares de la ciudad de la misma forma que lo haría un ave? La asociación juvenil Drone4Students ha realizado una serie de imágenes nocturnas del campus de Gijón desde un dron. ¿Preparados?
La foto recoge a vista de pájaro el distrito universitario gijonés en toda su extensión, con la localización en primer término de la Escuela Politénica y el edificio departamental, además de la Escuela de Marina Civil. Al fondo, se observa iluminado el estado del Molinón junto con una amplia panorámica de la zona Este de la ciudad, captando parte de su esencia en las horas nocturnas. Un trabajo exquisito, de suma belleza que invita a disfrutar de la imagen a pantalla completa y dejarse llevar por el vuelo de estos pájaros del nuevo siglo. Habrá quien imagine una gran urbe al estilo de Manhattan tras la captura realizada por el dron en el campus gijonés.
Estos robots voladores, ideales para trabajar en materias experimentales, ofrecen un sinfín de posibilidades, ventajas y oportunidades de implantación. La de los drones es una tendencia educativa innovadora muy similar a la robótica y a la programación, pero que sitúa como protagonista a los vehículos aéreos no tripulados. Los talleres que se celebrarán en los próximos meses en la Politécnica tienen la peculiaridad de que los docentes serán los propios estudiantes que enseñarán a sus compañeros la forma de montaje, usos y funcionamiento de los drones.
La asociación Drone4Students, nacida de la iniciativa de los propios estudiantes del campus local, ha puesto en marcha en fechas recientes unas jornadas que se desarrollarán entre los meses de febrero y mayo con el objetivo de introducir a los universitarios de este campus para enseñarles a construir, programar y volar su propio dron.
"En las jornadas introduciremos a los participantes (en su gran mayoría, alumnos de la Escuela Politécnica de Ingeniería) en el mundo de los drones, enseñándoles a construir, programar y volar su propio dron", detalló David Sampayo, secretario de la asociación Drone4Students.
Para que los iniciados en este mundo aprendan a volar bien su dron -"es mucho más fácil de lo que parece", señalan los promotores de las jornadas- se aconseja comenzar en espacios abiertos y lejos de objetos y personas y evitar meterse en recovecos, o comenzar con piruetas a una velocidad de vértigo. En los primeros momentos, advierten los chavales de Drone4Students, serán habituales los golpes contra muros, arbustos y árboles, algo que está a la orden del día. Coger el truco a algunos de los cuadricópteros que ayer se mostraban en los laboratorios de la Politécnica es cuestión de tiempo. Pero también de formarse en unas nociones mínimas de pilotaje. Esa es la ayuda que quieren prestar desde Drone4Students.
La imagen nocturna del campus universitario evidencia la grandiosidad de este espacio a vista de pájaro.
