Los paseantes que elevan la mirada estos días al pasar por el tramo de Marqués de San Esteban más cercano al Museo del Ferrocarril puede que se queden prendados de la iluminación navideña que pone el Ayuntamiento. Pero si son curiosos y giran su mirada hasta ponerla a la altura del cuarto piso de la fachada del bloque 61 descubrirán una decoración mucho más llamativa y mucho más personal.

Seis estampas navideñas que cobran vida a través de seis ventanas. Son el resultado del trabajo personal de un vecino, Emilio Fernández Sánchez, que ya hace unos años decidió dar salida a su creatividad y afición por el dibujo y la pintura dando vida a su propia decoración navideña. Y ofreciéndola a los demás a través de las ventanas de su casa. Lo que empezó como una iniciativa personal es ahora una reivindicación vecinal. Nadie de su entorno está dispuesto a que Emilio deje de decorar sus ventanas y de paso todo su bloque. El club de fans empieza por su mujer y sus dos hijos.

El nacimiento del niño Jesús, los Reyes Magos llegando en sus camellos... Todo dibujado y pintado por Emilio Fernández que completa el diseño con un sistema de emplomado. Cada pieza se encaja perfectamente a la ventana y allí se instala cada Navidad tras pasar el resto del año guardada a buen recaudo. Todas las ventanas de su vivienda que dan a Marqués de San Esteban lucen decoradas. Ya no hay más.

En los próximos meses Emilio Fernández dará un paso más en su camino como aficionado a la pintura con una primera exposición de su obra. A compartir con las fotografías de un hijo.