"El 2019 tiene que ser el año de la sociedad civil". Así de rotundo y esperanzado se muestra el presidente de la Federación de asociaciones de vecinos de la zona urbana de Gijón (FAV), Adrián Arias. Para el dirigente vecinal gijonés, lo más importante en este año que acaba de comenzar es "marcar una agenda propia", como ya hiciera el pasado año con temas de gran calado para la ciudad, como la lucha contra la contaminación atmosférica en todo el concejo o la puesta en marcha de forma efectiva del plan de integración ferroviaria de la ciudad, el conocido como plan de vías. Esos son precisamente los dos puntos donde convergen las peticiones del asociacionismo vecinal para este 2019. Pero no son sus únicas solicitudes ni mucho menos: mejorar la atención primaria, la movilidad o la participación ciudadana encabezan las peticiones de la zona urbana. En la zona rural, acabar con la problemática de los jabalíes, mejorar las comunicaciones o llevar a cabo una efectiva limpieza de los cauces de los ríos, son los deseos de los habitantes. Y para todos ellos, una fórmula común: la lucha vecinal.

"El año pasado hemos demostrado que somos capaces de resolver e intervenir en todos los problemas de la ciudad", ahonda Adrián Arias, que hace un llamamiento a "que sea la sociedad civil quien plantee soluciones". Y va más allá. "Tenemos que ser capaces de ser vanguardia, anticipar y saber reaccionar a los problemas de futuro que ya se están viendo en la ciudad", como la proliferación de las casas de apuestas o la problemática de la falta de falta de legislación respecto a los patinetes eléctricos. No olvida Arias los grandes problemas de la ciudad, ya citados, e insiste en que, con la fragmentación del arco municipal que previsiblemente se dará en Gijón tras las elecciones municipales de 2019, "la sociedad civil debe dar una respuesta, ya que sin ella, la institución no es capaz".

"Con el tema de la contaminación llevamos ya muchos años", se resigna Teresa Prada Fernández, presidenta de la asociación de vecinos "Alfonso Camín" de La Calzada, uno de los barrios más afectados por esta problemática. "Cada vez hay más porquería, no es un hecho puntual", ahonda Prada, "se baldea, se riega, se limpian las calles, pero la contaminación que está en el aire, la que respiramos, esa no se limpia".

Con ella coincide otra histórica del movimiento vecinal de la ciudad, Tita Caravera, presidenta de la asociación de vecinos de La Arena. "La contaminación es un problema muy grande", asume Caravera. Pero no el único de la ciudad. Tras años de lucha, en 2018 por fin pudo ver un avance claro en el plan de vías, un proyecto que ella luchó a brazo partido en su época como presidenta de la federación vecinal. Por ello, su principal deseo para este año es "que se consolide el plan de vías, que no nos vendan humo otra vez". Para ello, Caravera pide "una partida económica del ministerio de Fomento". Tampoco se olvida de otros problemas del día a día en la ciudad, como la gran precariedad que sufren muchos gijoneses, con lo que pide al Ayuntamiento "más planes de empleo y un aumento del salario social".

También al Ayuntamiento apunta en sus peticiones Esteban Calleja, presidente de la asociación de vecinos "Severo Ochoa" de Pumarín. "Tienen que hacer más caso a las asociaciones de vecinos. Hacen muchas promesas, tienen buen trato, pero al final no se plasma ninguna petición", explica Calleja, que critica la "dejadez y el pasotismo" de las administraciones. Por ello pide, para 2019, "que ya que queda poco de mandato, se vayan con buen sabor de boca". En cuestiones más concretas, Calleja asegura que "la contaminación es el problema más acuciante de Gijón" y confía en "descongestionar el plan de vías" y "que no se olviden de la atención primaria".

"Este tiene que ser el año del plan de vías", solicita Paulino Tuñón, presidente de la asociación de vecinos de La Guía, "tenemos que ser muy firmes y trabajar todos juntos en comunión con la federación de vecinos para resolverlo". Tuñón apunta también a la polución como una de las grandes problemáticas a erradicar en este 2019: "hay que acabar con la contaminación". El presidente vecinal de La Guía resume así sus peticiones: "la ciudadanía necesita calidad de vida, servicios y seguridad".