Nuevo robo en el barrio de La Calzada. Esta vez de madrugada. Un hombre al que ya busca la policía lanzó una tapa de alcantarilla contra la luna del escaparate de la perfumería Montes, en la calle Gran Capitán, sobre las tres de la mañana para apoderarse de varios productos de cosmética, especialmente colonias para huir con el botín antes de la llegada de la policía. "Estamos hasta el moño, vamos a tener que acabar durmiendo en los negocios", lamentó ayer Sara Montes, la propietaria del establecimiento, tras denunciar los hechos en Comisaría.

El incidente ocurrió de madrugada, sobre las tres de la mañana. Los ruidos alertaron a algún vecino, que salió a la ventana y después avisó a la dueña de la perfumería de lo ocurrido. "Me dijeron que sobre la una de la mañana habían estado por aquí tres jóvenes lanzando piedras contra el cristal, y que luego, como dos horas después, volvió uno de ellos y lo rompió con la tapa de una alcantarilla que cogió de la calle", describe Sara Montes, que lleva tres años al frente de esta perfumería. "Cuando llegué ya estaba aquí la policía y me dijeron que fuera a denunciar; no he podido dormir nada", explicó la comerciante.

La fractura del cristal se produjo por la parte baja, sin llegar a romperlo del todo. La tapa de alcantarilla provocó un amplio agujero por el que el ladrón pudo meter la mano para apoderarse de varios artículos de cosmética que estaban en el escaparate. "Se han llevado sobre todo colonias, más o menos 570 euros en mercancía", asegura la afectada. A esa pérdida hay que añadir el coste de reparación del cristal, que correrá a cargo del seguro. No obstante, tras este incidente, "estoy valorando poner verjas", explicó Sara Montes mientras despachaba a sus clientes.

El ladrón, por su parte, fue sorprendido tanto por una sereno como por al menos una vecina de la calle. Ésta última le increpó desde la ventana por el robo que acababa de cometer. La respuesta del susodicho fue hacer una peineta a la señora. "Encima de robar se puso a burlarse de quienes le vieron", lamentó resignada. Mientras Sara Montes atendía en el negocio, muchos fueron los vecinos de la zona que mostraron su solidaridad. "Ya está bien, vaya barrio; estamos inseguros", exclamó una clienta habitual de la zona al ver el cristal fracturado.

Poco después, sobre las once de la mañana, se personó en el lugar una agente de la Policía Científica, que realizó varias fotografías al escaparate. También se interesó por si alguien había visto algo y por las imágenes de las cámaras de seguridad de una sucursal bancaria justo en frente de la perfumería para ver si pudieron captar el rostro del asaltante.

"Es una vergüenza"

Este incidente ocurrió de madrugada y no con la tienda abierta como en los anteriores episodios registrados en el barrio. La oleada de atracos de los últimos meses tienen intranquilos a vecinos y comerciantes pese a la rápida resolución de casos de la Policía Nacional, que ya han logrado detener a cuatro personas -cada uno de ellos por un atraco- mientras continúa la búsqueda de los dos jóvenes que asaltaron una cafetería de la avenida Argentina.

Pese al refuerzo de la presencia policial en la zona, la preocupación no disminuye. "Es una vergüenza, ya no sé qué vamos a tener que hacer; necesitamos más seguridad y exigimos que se tomen medidas para ello", explica Teresa Prada Fernández, presidenta de la asociación "Alfonso Camín". "Es cierto que se ven más policías, pero no se ve más efectividad; igual tienen que cambiar la forma de repartir los policías o sus horarios", reflexiona Prada. "Es un problema muy grande y necesitamos ver resultados", concluye.