La bajada de las temperaturas empieza a pasar factura al Hospital de Cabueñes, que al mantener cerrada la segunda planta par -clausurada en verano, como viene siendo habitual, ante la poca carga asistencial de los meses estivales- se vio obligado ayer a habilitar 39 camas supletorias en el edificio. Según Clavelina Arce, subdirectora médica, la organización del centro planea abrir "de forma inminente" la planta citada, aunque todavía no saben la fecha exacta. "Cuando instalamos las camas había otros 38 pacientes pendientes de recibir el alta médica, por lo que de momento podemos aguantar. A partir de ahora, eso sí, haremos dos reuniones diarias para decidir si tenemos que abrir esa planta o no. El principal problema será la falta de personal", explicó.

El equipo médico puntualiza que la instalación de camas auxiliares no tiene, de momento, nada que ver con el pico gripal que suele colapsar todos los hospitales asturianos por estas fechas. "Las patologías más comunes ahora mismo son las gastroenteritis, las diarreas y las infecciones respiratorias. Los casos de gripe hasta ahora han sido muy puntuales", explicaron desde el servicio d e Urgencias. Estos problemas respiratorios, no obstante, son la primera "pista" para intuir la llegada de la gripe, aunque los médicos recordaron ayer la posibilidad de que la campaña de vacunas de este año consiga frenar la agresividad con la que el virus se propagó el pasado año. "En el último invierno la gripe llegó mucho antes, ya en diciembre, y la carga asistencial fue tremenda. Este año el retraso puede deberse a que las temperaturas no han empezado a bajar hasta hace unas semanas o a que las vacunas han surgido mejor efecto", puntualizaron las mismas fuentes.

De las 38 camas instaladas ayer en el hospital, 22 fueron las denominadas "camas S", conocidas como supletorias. Son las que se instalan en las habitaciones dobles para acoger a un tercer paciente. Las 17 restantes fueron "camas D", que son las que se habilitan en las habitaciones individuales del hospital para dar cobijo a una segunda persona. "El problema no está siendo tanto el número de pacientes, que también, sino el nivel de atención que necesitan. El otro día había 17 camas auxiliares y hace poco otras 8 y, aunque la cifra no era tan espectacular, la carga de trabajo que los profesionales tuvieron que afrontar esos días fue tremenda", puntualizan desde los sindicatos. "Estamos recibiendo a mucha gente mayor con patologías múltiples. Nos preocupa que se tape el número de camas diciendo que se están tramitando muchas altas porque, viendo el estado de los pacientes estos días, sabemos que si hoy les damos el alta en dos días van a volver a ingresar. La planta cerrada tiene que abrirse inmediatamente", añadieron.

Falta de personal

El principal escollo para abrir la planta cerrada, según Arce, será la contratación de personal, algo a lo que el propio gerente del hospital, Miguel Rodríguez, había hecho referencia hace unas semanas. "Todos sabemos la situación actual de las bolsas de empleo, que afecta sobre todo al área de Enfermería. Ya estamos haciendo llamadas en caso de que sea necesario abrir la planta de un día para otro, pero la situación es complicada", reconoció la subdirectora. Los sindicatos, sin embargo, tienen su propia teoría al respecto: "Estos días, aunque quisiesen, no van a poder abrir la planta. Los enfermeros se han dado de baja temporalmente de la bolsa de empleo para poder pasar las fiestas con sus familias. Es su derecho. Saben que la mayoría de los contratos que se ofrecen son precarios. Hasta después de Reyes no van a encontrar a casi nadie". "Otra cosa es que podamos aguantar hasta Reyes", sentenciaron.