Los usuarios de la línea 20 de Emtusa (Nuevo Roces-Montevil-Somió/La Pipa) podrán estrenar a partir de hoy los asientos de "Chucuchú", "Busrum", "Revoltosín" y "Correcalles". Son las cuatro últimas adquisiciones de la Empresa Municipal de Transportes Urbanos dentro de su plan de renovación de la flota. El camino a la chatarrería de sus antecesores deja la edad media de los vehículos en 7,5 años y sólo 13 modelos viejos -Euro III frente a los nuevos Euro VI- dentro de un parque de 82 autobuses. La inversión ronda el millón de euros.
Tener autobuses más accesibles y menos contaminantes se lo han ganado los usuarios de la línea 2 después de incrementar un 5,43% el nivel de uso de la línea hasta alcanzar los 830.000 viajes en el año que acaba de terminar: 43.000 viajes más que el año anterior El incremento de la línea 20 está muy por encima de la subida del 1,93%, que se traduce en 350.000 viajes, del global de Emtusa que cerró el año pasado con 18,6 millones de viajeros transportados. Los nuevos autobuses apoyarán el crecimiento de la línea 20, que da servicio a un barrio como Nuevo Roces que lleva tiempo reclamando mejoras en sus comunicaciones.
La presentación de los nuevos vehículos se hizo ayer en la plaza Mayor en un acto presidido por el edil Esteban Aparicio, presidente de Emtusa. Desde el comité de empresa, su presidente Pedro Roldán, denunciaba que el envejecimiento de la flota se mantendrá mientras el nivel de renovación no sea de entre 6 y 8 autobuses al año y critica que Gijón se queda fuera del circuito nacional de empresas que apuestan por los vehículos híbridos. Un tipo de vehículos que, anunció Aparicio, llegarán a Gijón en 2020.
Por otro lado, Iniciativa pol asturianu felicitó públicamente a Emtusa por usar la llingua en los autobuses y pidió que también lo hiciera en redes sociales.
