Las partidas inversoras son las que más se resienten en los procesos de prórroga presupuestaria. Pero todo tiene solución: el problema es dar con ella en tiempo y forma para que la ciudad no se paralice. El trabajo del equipo de gobierno se centra ahora mismo en la contratación de un préstamo que rondaría los 18 millones de euros para que el Pleno -ya en febrero y a través de dos modificaciones presupuestarias- diera salida a operaciones de inversión. Por un lado a las que ya están comprometidas a través de contratos adjudicados en los últimos meses y, por otro, a las nuevas que consigan el acuerdo mayoritario de los grupos políticos. El crecimiento de la inversión municipales también se conseguirá vía incorporación de remanentes.