El hombre de 40 años y nacionalidad búlgara acusado de asaltar con violencia a al menos seis mujeres en Gijón, la mayoría de ellas avanzada edad, reconoció ayer todos los cargos y aceptó una pena de cárcel de 16 años y siete meses, una condena ligeramente inferior a los casi 18 años que de inicio pedía el Ministerio Fiscal por los ataques, cometidos todos ellos en los barrios de Pumarín y Contrueces. También aceptó el pago de 1.080 euros de multa y otros 28.210 euros en concepto de responsabilidad civil por los daños y secuelas generados con sus asaltos.

El delincuente, de iniciales I. S. N. y con antecedentes por malos tratos, entró en la sala de vistas con las esposas puestas y custodiado por dos agentes de la Policía Nacional. Este hombre lleva en prisión provisional desde que le detuvieron los agentes del Grupo I de la Policía Judicial en mayo del pasado año, tras cometer sus robos violentos en apenas una semana de diferencia. Los realizó siempre a plena luz del día, de tarde, en los barrios de Pumarín y Contrueces.

El "modus operandi" coincidía. Acechaba a una mujer que fuera sola, principalmente con dificultades de movilidad, y de cierta edad. Tras un fuerte "tirón" les arrebataba el bolso, lo que motivó que varias de sus víctimas sufriesen heridas al caer al suelo. De hecho, una de ellas, de 89 años, sufrió la rotura de un brazo.

Todas sus víctimas evitaron verle la cara ayer al delincuente búlgaro, al llegar éste a un acuerdo con la Fiscalía que hizo innecesaria la continuación del juicio. La mayoría de las mujeres asaltadas -los ataques se concentraron en una semana- rondaban los 80 años de edad y algunas tenían notables problemas de movilidad.