La Fiscalía modificó ayer sus conclusiones en la vista que enjuicia el accidente sucedido en Somió en 2015 en el que un joven motorista chocó contra un todoterreno saliendo gravemente herido. El Ministerio Fiscal se adhirió finalmente a la petición que hacía la acusación particular -representada por la letrada Sylvia Garrido Galindo- e interesa una pena de dos años de prisión para la conductora del coche al entender que los hechos son constitutivos de una imprudencia grave, y no menos grave como al principio interesaba.

La Fiscalía, que también solicita la retirada del carnet durante dos años, entiende que la mujer, tras realizar un stop, se incorporó a la carretera principal, por la que venía el joven con prioridad "sin cerciorarse de que no venía otro vehículo. No miró, no hay otra explicación", aseguró después de que las pruebas periciales hubieran dejado "meridianamente claro" que la visibilidad era suficiente para haber visto venir al motorista.

"La causa y responsabilidad es suya", ahondó la Fiscal, que incidió en que la vida del joven, que contaba 18 años en el momento del accidente, "quedó marcada para siempre, con su calidad de vida cercenada". El joven perdió el bazo, un riñón, parte de la visión al quedarle el nervio óptico atrofiado y, además, sufre secuelas psicológicas.

Garrido Galindo -que pide dos años y dos meses de cárcel y dos años y medio de prohibición de conducir- incidió en que la mujer "irrumpió de forma súbita en la carretera, cortando el paso a la motocicleta", como así atestiguó un joven que vio todo el accidente -en palabras de la Fiscal, "el testigo más válido" al no tener relación con ninguna de las partes-. "Es imposible que no viera la moto", aseveró la letrada.

La defensa solicita la libre absolución de la acusada, al entender que el chico, al que afectaba una señal semafórica intermitente metros atrás, "debió atemperar la velocidad". El letrado no dio credibilidad ninguna al relato del joven que narró el accidente, al dar datos métricos inexactos. "Infringió todas las normas de velocidad", aseguró sobre la víctima, del que llegó a decir en repetidas ocasiones que "va con la moto por ahí a toda pastilla, lo sabe todo Gijón". La víctima, que en instancias anteriores aseguró no recordar nada, no compareció para no agravar su trauma, expuso la acusación.