Los itinerarios del Camino de Santiago continúan siendo un factor clave en el turismo asturiano, sobre todo, por el carácter históricamente peregrino de la ciudad de Oviedo. El experto Víctor Guerra, no obstante, aseguró en su ponencia de esta semana en el Club LA NUEVA ESPAÑA de Gijón que la nueva ruta "de moda" es el Camino del Norte y que, al bordear buena parte de la costa asturiana, hace que muchos peregrinos ignoren ahora la capital y prefieran quedar en albergues gijoneses.

La ruta jacobea citada, según Guerra, intenta bordear el mar y llegar a Santiago en línea recta, por lo que en muchas partes del recorrido los peregrinos deberán bajar y subir los valles de pequeños ríos costeros. "Muchos prefieren esta ruta porque en casi todo el recorrido se ve alguna playa, pero en época de lluvias provoca problemas. Hay repechos que acaban en unos cauces de agua que no se pueden cruzar de un simple salto", resumió. Al tener siempre los ojos puestos en el horizonte, esta versión del Camino de Santiago podría suponer, a la larga, un buen reclamo turístico para la gente de Gijón. Según el experto, el perfil del peregrino se centra ahora en "gente joven que prefiere ver el mar y tirarse medio mes como mochileros", por lo que la capital asturiana "ya no se ve como un destino ineludible". "Es comprensible que en la ruta del Norte Gijón empiece a atraer a los peregrinos que antes iban a Oviedo; cada vez los peregrinos, sobre todo los jóvenes, tienen una conciencia más turística que religiosa", aseguró.