Dos jóvenes gijoneses, de 21 y 22 años de edad respectivamente, han resultado detenidos este fin de semana por la Policía Nacional tras ser sorprendidos por agentes de paisano vendiendo sustancias estupefacientes en un local de ocio de la calle Marqués de San Esteban. Se les intervinieron varios envoltorios con cocaína, éxtasis y hachís preparados para su distribución. También fueron denunciadas dos chicas que acompañaban a los detenidos por obstaculizar la labor policial, insultar y enfrentarse a los policías. Uno de los arrestados ya fue detenido el pasado diciembre en una macrooperación policial contra el tráfico de drogas en la ciudad.
Los policías de servicio de paisano integrantes del dispositivo de prevención de hurtos y de control de consumo y venta de estupefacientes en establecimientos de ocio, en la madrugada del domingo, a las 5.30 horas detectaron en un bar de la calle Marqués de San Esteban a dos jóvenes que eran objeto de atención del resto de los clientes que se aproximaban a ellos y parecían demandarles alguna cosa. Los agentes se acercaron con la premisa de averiguar cuál era el motivo de tanto interés, pero en ese momento estas personas se percataron de la presencia policial e intentaron marcharse del lugar, por lo que fueron interceptados.
Drogas entre sus ropas
En su identificación los agentes comprobaron que los investigados llevaban ocultos entre sus ropas, a la altura de la cintura, varios envoltorios de cocaína, éxtasis y hachís y además pudieron corroborar que habían distribuido estas sustancias entre otros clientes del local que les rodeaban cuando fueron sorprendidos por los efectivos policiales.
A tenor de estos hechos y una vez incautadas las sustancias estupefacientes, fueron detenidos como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas. La intervención policial se vio dificultada por dos mujeres que acompañaban a los detenidos que increparon y entorpecieron la actuación de los agentes, por lo que fueron denunciadas por resistencia y desobediencia.
Antecedentes
Los arrestados de 21 y 22 años, vecinos de Gijón tenían antecedentes policiales, uno de ellos ya había sido detenido en diciembre del año pasado en una operación policial llevada a cabo por el Grupo de Estupefacientes de Gijón en la que fueron detenidas 15 personas, miembros de un grupo criminal dedicadas a la venta y distribución de drogas de diseño en bares y locales. En aquella operación se intervinieron más de 17 kilos de drogas de todo tipo de sustancias: hachís, ketamina, cocaína, marihuana, éxtasis, speed, heroína y cristal. Además, los investigadores lograron incautar 20.565 euros provenientes del tráfico de drogas. También varias armas y un fusil de asalto.
