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Menchu Lamas: "Mi pintura mira atrás y adelante"

La artista gallega, fundadora de "Atlántica", expone en Gema Llamazares su última obra

Menchu Lamas: "Mi pintura mira atrás y adelante"

Es una de las artistas importantes de la actual pintura española. Fundadora en 1980 del imprescindible colectivo "Atlántica", plataforma de encuentro y debate cercana a los creadores que los estudiosos han venido asociando a la llamada "movida gallega" (de la moda a "Siniestro Total" o Antón Reixa), la viguesa Menchu Lamas (1954) vuelve a la sala gijonesa Gema Llamazares con una exposición en la que reúne obras firmadas a lo largo de los dos últimos años. Bajo el título "Memoria del color", agrupa una veintena de piezas en las que se adunan la investigación cromática y la geométrica, pero siempre desde los personales códigos semánticos y las síntesis icónicas que la creadora viene proponiendo desde hace años. "Mi pintura mira siempre hacia atrás y hacia adelante", afirma.

Y es que, en realidad, en la obra de la artista gallega hay una persuasiva búsqueda en la que lo nuevo enlaza o se "interrelaciona", como ella misma explica, con sus piezas anteriores. Hay quien ha visto en sus cuadros y en sus piezas extractos, fragmentos, de un cierto imaginario simbólico de Galicia (de la luna al pájaro, del círculo a la mano), aunque esa iconografía funcione como una metáfora universal que se reviste, a su vez, de un tratamiento plástico propio.

Menchu Lamas recibió en 2010 el Premio Cultura Gallega de las Artes Plásticas. Y su obra "O pescador" fue una de las seleccionadas, junto con otras piezas del Museo Reina Sofía, para la exposición "El poder del arte". Esta muestra, que se organizó en el Congreso de los Diputados, se organizó para conmemorar los cuarenta años de la Constitución Española. Acaba de exponer en el museo Artium, en Vitoria, y el programa "Metrópolis", de TVE, le dedicará un monográfico el próximo 8 de marzo, según adelanta Antón Patiño (otro de los fundadores de "Atlántica") en un texto que dedica a "Memoria del color".

El pintor y escritor gallego resume muy bien la atracción que produce en el espectador la obra de Menchu Lamas: "El enigma siempre presente en su trabajo que aparece próximo al emblema y con la rotundidad visual de un talismán". La exposición, que se inaugurará el próximo viernes (20:00 horas), incluye algunos cuadros de gran tamaño. Son acrílicos sobre tela. "Hay también una cierta metalización, que me interesa porque da relieve a la pieza", dice la artista.

Menchu Lamas describe esta nueva exposición, que lleva el título de una de las obras, como una suma en la que "la vibración del color adquiere una mayor importancia; tiene más protagonismo, con una mezcla de colores fríos y calientes", explica. Y añade: "Aparecen también figuras simbólicas: formas de amebas; como agujeros dentro del cuadro". Pero hay también laberintos y unas geometrías que remiten a ese atractivo catálogo de formalizaciones pictóricas que están en la pintura de la viguesa. Son universos singulares; abstracciones simbólicas, como afirma Antón Patiño, de extraordinaria potencia visual. La artista, que mantiene su estudio en Vigo y tiene otro en Madrid, cultiva esa mirada que "va de adelante hacia atrás". Y al revés, claro. Una pintura que no se detiene. Y que se manifiesta como cambiante signo de esa dialéctica fecunda.

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