Dos hosteleros de Gijón, hombre y mujer, que estaban acusados de falsedad en documento privado para encubrir un despido de uno de sus empleados -trabajaba con ellos como encargado de un establecimiento en la plaza de Florencio Rodríguez- han salido absueltos de todos los cargos. El exempleado les denunció por despido improcedente y, según él, sus exjefes presentaron al juicio en el Juzgado de lo Social unos documentos falsificados. La sección octava de la Audiencia sentencia que no está acreditada la falsedad ni la autoría de las firmas y ha absuelto a los dos hosteleros, que estuvieron representados por el abogado Saúl Medina, de M&R Abogados.