El número de enfermos de edad avanzada con patologías respiratorias crónicas, los pacientes en aislamiento y el gran aumento de la actividad quirúrgica de los últimos días obligaron ayer a Cabueñes a instalar 63 camas de refuerzo, 40 de ellas supletorias, y a empezar a derivar a algunos usuarios al hospital concertado de Jove. Los sindicatos, que esta semana insistieron en la necesidad de prolongar los contratos de los 29 empleados de refuerzo que, en principio, terminarían su estancia en el centro el día 28 de este mes, pedirán hoy reunirse de nuevo con gerencia para pedir explicaciones sobre la "saturación" que el hospital sufre estos días. "Si se está aumentando el número de cirugías hay que aumentar también el del personal en planta", explican.
Aunque Cabueñes lleva toda la semana habilitando decenas de camas de refuerzo (llegó a superar los 450 pacientes ingresados), el personal sanitario confirmó por primera vez ayer que el nivel de ocupación ya obliga a derivar algunos pacientes a Jove. Eso, para ellos, es la "confirmación de que el hospital se está colapsando". Esperaban haber recibido respuestas este miércoles en la reunión mensual con la jefatura, pero el gerente tenía un compromiso en Oviedo. Ayer estuvo también reunido toda la mañana, así que será hoy a primera hora cuando puedan reunirse con él. De momento, la idea de los sindicatos de mantener a los 29 empleados de refuerzo y estudiar un posible aumento de plantilla secundario ya tiene el visto bueno de la dirección de Enfermería. "Como Urgencias no está colapsada, la única explicación que nos queda es que se esté operando a todo gas para cumplir con los nuevos plazos listas de espera, y si eso es así necesitamos un plantilla acorde al nuevo ritmo. Así no podemos seguir", concretaron los sindicatos. Cabueñes contrató en enero a los 29 refuerzos para paliar lo que parecía un inminente pico gripal de invierno -había medio centenar de camas auxiliares por infecciones respiratorias- que resultó ser una "falsa alarma". Los casos de gripe, según el personal, "no llegaron a ser un problema" y el pico de incidencias ya se ha superado. El problema que sí parece prolongarse estos meses es el de pacientes de avanzada edad con procesos respiratorios "que se complican" y algún aislamiento. "Si ahora encima empezamos a operar más, la plantilla tiene que aumentarse sí o sí", sentencia el personal sanitario.
