Los peques de las casa fueron los grandes protagonistas del primer día del Antroxu. Niños y jóvenes sacaron ayer los disfraces, y los centros educativos de la ciudad sustituyeron los libros por el maquillaje, los globos y las serpentinas característicos de estas fechas. En todos ellos, la originalidad estuvo más presente que nunca. Es el caso del IES Roces, en el que los chavales organizaron su propio concurso de charangas. Así, cada clase eligió una temática y entonó una copla diferente con una letra escrita por ellos. Playmóbils, abuelas y animales fueron algunos de los disfraces elegidos.

"Lo importante es fomentar el sentido del humor. Los profesores recibimos muchas pullitas, los alumnos protestan por los exámenes y los deberes y cuentan sus chistes internos", explica Natalia Carballo, jefa de estudios adjunta del instituto. La actividad, que el colegio estrenó este año, también tiene una finalidad pedagógica: "Se trabaja la cohesión de los grupos y hace que los chavales se unan más. También fomenta el pensamiento crítico, se trabaja la lengua, la música y la convivencia", añadió.

En el colegio Río Piles niños y profesores también se volcaron en preparar una fiesta muy especial, en el que los superhéroes y villanos fueron la temática general. Los chavales, con la ayuda de sus padres, hicieron su propio disfraz y desfilaron junto a sus profesores, que también se animaron a ponerse la capa y el antifaz. Algunos, como el director del centro, prefirieron vestirse de villanos, y protagonizaron una batalla en la que los niños trataron de ahuyentarlos del colegio. "Es una tradición que les encanta, llevábamos años sin celebrar el Antroxu, y ya era hora de recuperar una fiesta tan guapa", afirma Amalio Núñez, director del centro.

Los peques del centro infantil San Eutiquio se disfrazaron de romanos y jugaron a juegos de la época. En el Colegio Gloria Fuertes la temática fue el espacio, y los niños emularon el sistema solar con sus trajes. En el centro Ángel de la Guarda de Aspace Gijón también quisieron sumarse a la fiesta, y muchos de los usuarios se disfrazaron de emoticonos y celebraron una merienda. El colegio Jovellanos y La Corolla fueron otros centros que se sumaron al Antroxu.