Gijón ya deja huella en la Antártida. Tal y como había prometido hace un par de meses, el brigada gijonés Jaime Albela (que participa en una campaña en la zona) se ha encargado de que una bandera de la ciudad ondee en el continente del polo sur, que desde estos días luce también una señal informativa que reza "Gijón: 12.773 kilómetros), que es la distancia en línea recta que separa la Plaza Mayor de la ciudad y el campamento en la que trabaja el equipo del militar.

Albela, integrante del Ejército de Tierra, había visitado el Ayuntamiento el pasado mes de diciembre para recoger las dos insignias porque, explicó, quería aprovechar su viaje para ayudar a que la ciudad estuviese representada en el continente. La izada de banderas, de hecho, es habitual en la denominada base antártica española Gabriel de Castilla (situada en la isla Concepción del archipiélago Shetland del Sur) y son muchos los militares los que homenajean así sus ciudades de origen. El campamento tiene también varios postes en los se instalan decenas de señales que indican a qué distancia del norte se encuentra cada lugar. Gijón, hasta ahora, no estaba entre las elegidas.

El militar fue nombrado responsable del área de navegación y movimiento de la XXXII Campaña Antártica del Ejército de Tierra. Estará desplazado, junto a otros 12 militares, durante algo más de tres meses. Sus tareas se centrarán en dar apoyo logístico y técnico al numeroso grupo de investigadores que trabajan en la zona. La colaboración entre los dos colectivos se remonta a 1988 (responden tanto al Ministerio de Economía e Industria como al Comité Polar Español) y busca fomentar la investigación científica con proyectos de transmisiones, sanidad y análisis de alimentos. Albela, además, trabaja en la base leonesa de la Unidad Militar de Emergencias (UME). Cuando le comunicaron que podría viajar al continente, eso sí, aseguró que pisar la Antártida era uno de sus mayores deseos desde hacía muchos años y que la concesión es uno de los más solicitados por los militares.