La comunidad educativa del colegio de la Inmaculada sigue impactada tras conocer la noticia de que la Compañía de Jesús ha decidido apartar de la docencia al jesuita Jorge Enríquez Muñoz, contra el que pesa una denuncia por abuso sexual cometida en el colegio de Gijón, en el que este jesuita estuvo durante los años 2005 y 2008. A la asociación de padres les han remitido ya una carta explicando lo ocurrido.

El padre Jorge Enríquez, que se encontraba en el colegio de Logroño actualmente, fue apartado de forma inmediata el mes de enero después de que los jesuitas tuviesen conocimiento de la denuncia presentada contra él. Ahora se encuentra recluida y alejado del contacto con niños en la casa de ejercicios de Villagarcía de Campos, en Valladolid, a la espera de que se esclarezcan los hechos denunciandos.

Este es el comunicado íntegro remitido a las familias del colegio de la Inmaculada.

Estimadas familias:

El pasado día 12 de enero, el P. Provincial de España de la Compañía de Jesús fue informado de la existencia de una denuncia por abusos sexuales. El denunciado es el P. Jorge Enríquez Muñoz y los presuntos abusos habrían ocurrido en Gijón.Esta es la razón por la que el P. Provincial, siguiendo el protocolo establecido, trasladó de forma inmediata al P. Jorge desde Logroño, donde se encontraba destinado, a otra ciudad mientras se clarifica lo sucedido, imponiéndole también algunas medidas cautelares como la de no tener contacto con menores.El hecho de no haber comunicado hasta ahora nada sobre esta denuncia obedecía a la petición expresa de la víctima y su familia de evitar todo tipo de publicidad. Sin embargo, dado que en el proceso judicial y canónico que se siguen para esclarecer los hechos y buscar la justicia comienzan a existir rumores y filtraciones, creemos que debemos haceros partícipes de esta noticia.En esta situación tenemos que ser capaces de equilibrar la atención y la acogida a la presunta víctima, junto a la presunción de inocencia y el derecho de cualquier persona denunciada a defenderse.Por el momento, solo podemos pedir respeto y colaboración con los procedimientos canónicos y judiciales en curso; y desear, una vez más, que esta etapa compleja pero necesaria que nos toca afrontar en nuestras instituciones, haga que estas se conviertan en entornos protegidos y seguros para cualquier menor o persona vulnerable.Como se está haciendo ya en distintos lugares y obras apostólicas de España, la Compañía de Jesús pondrá en marcha, y a la mayor brevedad, un equipo de escucha y acogida para atender a cualquier víctima de abusos ocurridos en el pasado.Muchas gracias por vuestro apoyo y confianza.