Dos jóvenes fueron detenidos a última hora de la tarde de ayer tras asaltar a punta de cuchillo un estanco al final de la avenida de Oviedo, en el barrio de Nuevo Gijón. El operativo desplegado tras el atraco por la Policía Nacional permitió que fuesen interceptados a la altura de la avenida de la Argentina en el vehículo en el que huyeron, un Seat Ibiza de color rojo.

El atraco se produjo sobre las 20.30 horas, al filo del horario habitual de cierre de estos comercios, en el estanco ubicado al principio de la avenida de Oviedo, justo después de la calle Dolores Ibárruri. Ambos accedieron al establecimiento con sus rostros tapados para evitar que les viesen las caras, esgrimieron un arma blanca sin mediar palabra y pidieron la recaudación al personal, que no sufrió daños físicos.

Una vez logrado el botín, los dos delincuentes emprendieron la huida en coche, pero la policía, que desplegó un dispositivo de cierre -resultó efectivo para apresarlos-, les fue siguiendo por el poblado de Santa Bárbara y Tremañes hasta que ambos fueron interceptados finalmente en la avenida de la Argentina, a la altura de la calle Núñez de Balboa, por una patrulla de la Policía Local que les cortó el paso.

Tras identificarles, los agentes solicitaron refuerzos y varias patrullas más, que allí se personaron. Finalmente, resultaron detenidos por la Policía Local de Gijón por un presunto delito de robo con violencia. La Policía Nacional, no obstante, se encarga ahora de realizar las diligencias oportunas y tomarles declaración en Comisaría sobre los hechos que se les atribuyen antes de que pasen a disposición judicial, entre hoy y mañana.

Investigación abierta

Según fuentes policiales, este atraco poco tiene que ver con el perpetrado en el mes de octubre del año pasado en el barrio de La Calzada, cuando apuñalaron a un estanquero para robarle la recaudación. No obstante, como ocurre en estos casos, no se descarta ningúm escenario hasta que vayan avanzando las pesquisas.

En el otro atraco, ocurrido en la avenida de La Argentina, los responsables estuvieron siguiendo la rutina del propietario del negocio durante varios días. De hecho, aprovecharon para actuar en vísperas del puente del 12 de octubre, a sabiendas de que llevaría la recaudación al banco, unos 8.000 euros. Le siguieron hasta la calle México, donde tenía aparcado el coche -le pincharon hasta una rueda para evitar su huida-, y le apuñalaron en una pierna. Tras ese incidente se reforzó la presencia policial en el barrio.