ArcelorMittal ha solicitado una concesión por diez años para una terminal de productos siderúrgicos en el primer espigón del puerto de El Musel, donde viene operando desde hace años, si bien mediante autorizaciones administrativas renovadas anualmente.

Ese es el muelle en el que se embarcan los grandes pedidos de carril, chapa y alambrón que recibe la siderúrgica de clientes extranjeros (los cargamentos de menor tamaño, de alambrón o bobinas, se envían contenerizados). Inicialmente Arcelor usaba ese muelle mediante un acuerdo comercial de explotación que en 2015 se sustituyó por una autorización administrativa y que ahora previsiblemente se va a transformar en una concesión a largo plazo de 35.634 metros cuadrados.

La concesión aún no está otorgada y, en teoría, podría no llevársela Arcelor. El motivo es que ante una solicitud de esas características el Puerto está obligado a abrir un trámite de compentencia, como ha hecho. Eso supone que en el plazo de un mes, a contar desde que ayer se anunció en el BOE, otras empresas interesadas en esa terminal pueden intentar mejorar la oferta de la multinacional siderúrgica.

Carbón para la ampliación

En ese sentido, para decidir la adjudicación de la nueva terminal siderúrgica, el Puerto valorará la captación de nuevos tráficos portuarios, la cuantía de la inversión, la rentabilidad de la misma y la compatibilidad con otros usos. Por El Musel no sólo se exportan productos siderúrgicos, sino que también se importan.

La de Arcelor no es la única solicitud de concesión en trámite de competencia. Ocurre lo mismo con los 5.000 metros cuadrados que ha pedido en concesión Transportes y Construcciones La Mata (TyC La Mata) en la zona del Cabo Torres, en la ampliación, para almacenamiento, cribado y expedición de carbón.