El pintor gijonés Alberto Ámez (1963) tiene previsto inaugurar hoy en la sala Espacio Líquido, a partir de las siete de la tarde, la exposición "Gabinete de pinturas", una muestra en la que reúne obras inspiradas por algunos paisajes asturianos o del norte leonés.

"Son paisajes con figuras", dice el pintor. El también artista Paco Nadie, en una palabras de presentación de esta muestra, afirma: "Pero hay algo en estas visiones trascendentales, capaces de superar las ataduras y el misterio de lo real que va de lo inmenso del paisaje a los detalles". Y más: "Una visión romántica y sublime, un lugar donde la expresión se convierte en un protolenguaje en el que todo nos habla: nubes, ríos y arbustos, árboles...".

Es la primera vez que Alberto Ámez, dueño de una figuración muy personal y matizada, expone en la sala que dirige Nuria Fernández. Una manifestación del pintor permite entender su forma de situarse ante el cuadro, ante la composición pictórica: "Si visito una iglesia o ruinas románicas aparece el edificio, pero lo realmente significativo es el conjunto de elementos y experiencias adosados al entorno: el paisaje, unas ramas, unas piedras, el clima, la luz...".

Esa manera de situarse ante el paisaje y el cuadro logran, según subraya Paco Nadie, una "impresión alterada" de la que surge, a su vez, "una visión pormenorizada en la que los detalles toman el protagonismo y son el inicio de otras versiones distintas de lo real". "Gabinete de pinturas" abre la mirada, en fin, a una matizada manera de ver la naturaleza.