"Sí hay algo que todos compartimos y que nos hace más humanos es sentarnos en torno a un mantel". Así comenzaron ayer los historiadores José Luis Carmona y Luis Arias González su presentación de "Comer fuera de casa: tres siglos de restauración gijonesa (1700-2000)", un libro editado por el Ayuntamiento que versa, principalmente, sobre la alimentación, "un sujeto histórico importantísimo", pero "muy marginado a nivel académico".

La presentación, que tuvo lugar ante un abarrotado salón del parador Molino Viejo y contó con la introducción de la concejal de Educación y Cultura, Montserrat López Moro, desgranó lo más importante del contenido del libro, "que no es un libro de recetas ni un manual gastronómico, sino "un retrato de evolución de los gustos y hábitos de comida de los gijoneses, de los restaurantes y de sus cocineros, que dejaron lo mejor de su vida dando de comer al hambriento".

Ambos autores destacaron la importancia de la gastronomía "para explicar las costumbres y la evolución de las gentes", además de "las pasiones que levanta, porque comer fuera de casa no entiende de fronteras, de edades ni de clases sociales".