A lo largo de la próxima década los vehículos eléctricos acabarán por colonizar el sector del automóvil. El reto en Europa, ahora, es modernizar su modelo de producción de baterías para evitar que Asia se haga con un negocio que supondría la destrucción de unos 40 o 50 millones de puestos de trabajo. Así lo explicó ayer Joaquín Chacón (1965, Madrid), CEO en Albufera Energy Storage y presidente de la Asociación Empresarial de Pilas, Baterías y Almacenamiento Energético (Aepibal), durante su ponencia en el Campus de Gijón.
- Por comparar, ¿cómo son las baterías actuales de coches eléctricos y cuál es la tendencia de futuro?
-Hasta ahora lo que existen son baterías muy complejas, con muchos mecanismos electrónicos, que son caras de mantener y reparar. Nuestro trabajo se orienta hacia la producción de baterías más sostenibles, que es la gran marca de Europa, y mucho más sencillas.
- Suponemos que se ampliará también el tiempo de autonomía entre recargas.
-Sí, claro. Lo más común ahora mismo son coches eléctricos que duran unos 250 kilómetros. Dentro de no mucho lo normal serán los 800.
- ¿Cuándo empezaremos a ver esos cambios?
-Se calcula que se normalizará en el 2025. Antes saldrán prototipos y luego ya se fabricarán en mayor cantidad. La idea es que en el 2030 formará parte de la mayoría de las marcas.
- Por esa época, entonces, el precio habitual de este modelo de automóvil también se reducirá.
-Sí, tendremos baterías con cinco veces más prestaciones que costarán cinco veces menos que las de ahora. Y la gran ventaja es que serán coches mucho más fáciles de mantener, al menos si se compara con los tradicionales.
- ¿Cómo se afrontará el tema de seguridad al volante?
-Ya está estudiado y resuelto, al menos en Europa. Aquí habrá un trabajo muy fuerte en cuanto a los sistemas de seguridad a nivel internacional. Tendrán todas las garantías y, como hay menos piezas, no serán habituales las averías en piezas raras.
- Todavía hay usuarios muy reticentes a hacer el cambio.
-Sí, pero se hará. También los aviones serán eléctricos y a algunos les da miedo. Tenemos la sensación de que lo eléctrico se puede romper más fácilmente y no es así, porque es más sencillo. Es un motor eléctrico con una batería que lo alimenta. Y ya.
- ¿Habrá cambios a nivel laboral? El petróleo tiene un peso importante.
-Sí, lo que pasa es que Europa ya es líder a nivel mundial en el sector tecnológico de vehículos; muchísimos trabajos dependen de él. El miedo que existe ahora es que los coches eléctricos vengan ya con sus baterías puestas desde Asia, que es quien fabrica la mayoría de baterías actuales. Por eso se está trabajando en ello, si perdemos eso se eliminarían 40 o 50 millones de puestos de trabajo. Ahora mismo la batería de un coche eléctrico supone la mitad del precio del vehículo entero.
- Habrá que aumentar los puestos de cargas.
-Por supuesto, eso estará superado antes de 2025. Muchas compañías eléctricas ya han anunciado nuevas inversiones en ese sector. Vendrá de forma natural porque los clientes lo pedirán.
- ¿Cuánto durará un coche eléctrico del futuro?
-No se ha calculado. El primero que vino a España lo hizo hace 16 años y sigue perfecto, casi como el primer día. Mucho, durarán mucho. Y si hablamos de coches del futuro, también hay que hablar de los coches autónomos, sin conductor.
- Bueno, pero para eso quedará bastante tiempo.
-No creas... No sería extraño que dentro de no mucho haya en Gijón una flota de taxis autónomos que puedas controlar con tu teléfono móvil.
- Eso da un poco de miedo, ¿no?
-Qué va, lo que pasa es que no serán coches como los de ahora. Serán más pequeños, con menos potencia y de dos plazas, o algo similar.
- ¿Las nuevas baterías reducirán el tiempo de carga?
-El 90% de usuarios cargan sus coches por la noche o durante su jornada laboral, o sea, ocho horas. Se reducirá, pero la mayoría de usuarios no lo necesita.
