Un vecino de Gijón de 51 años ha sido detenido por un delito de daños después de golpear varias máquinas expendedoras de refrescos y golosinas en el barrio de La Calzada. Este individuo, que cuenta con antecedentes policiales por delitos contra el patrimonio y tiene varias reclamaciones judiciales, causó desperfectos en los aparatos superiores a los 2.000 euros.
La investigación policial se inició a raíz de la denuncia del dueño de estas máquinas expendedoras después de detectar varias quejas de usuarios porque introducían el dinero y se quedaba atascado. En las cámaras de seguridad pudo confirmar que un individuo metía papeles y vertía líquido en la ranura de las monedas. Poco después, el sospechoso volvía a actuar introduciendo un alambre por el hueco para las monedas y propinaba patadas en la máquina. Los daños superaron los 2.000 euros sin contar el perjuicio de no poder vender productos.
"In fraganti"
Pasados unos días, el ahora detenido volvió a actuar sobre las máquinas expendedoras pero le pillaron "in fraganti". Fue el propio propietario quien se percató de ello. Alertó entonces a la Policía Nacional y los agentes pudieron detenerle. También le requisaron un destornillador y un arma blanca que portaba y constataron que contaba con antecedentes por delitos contra el patrimonio.
