Carlos Rubiera ya no está solo en el listado de concejales reprobados por el Pleno de Gijón. Quien fuera su heredera en la concejalía de Educación y Cultura, Montserrat López Moro, también lo ha sido en este dudoso honor. La edil forista salía reprobada ayer del salón de plenos a partir de una propuesta de la edil socialista Lara Martínez que fue secundada por los tres partidos de la izquierda. Foro y Ciudadanos dijeron no. El PP se abstuvo.

"Después de los cuatro años perdidos con Carlos Rubiera no nos imaginábamos que se iba a dar aquello de que otro vendrá que bueno me hará. La señora López Moro es de quienes, en política como en la vida, renuncia a enfrentarse a los retos y se instala en el no hacer nada", denunció Martínez. La edil del PSOE, en su despedida activa del Pleno, puso en el debe de la edil forista desde la falta de un plan de usos para Tabacalera a la cancelación de los actos del 50.º aniversario del Museo del Pueblu d´Asturies, la falta de fondos en las bibliotecas municipales o los problemas de personal en las escuelas infantiles. "Esta simbólica reprobación es un acto de justicia para el sector cultural de la ciudad", remató.

A esas críticas sumó Ana Castaño, de Izquierda Unida, las vinculadas a recortes económicos y falta de proyectos en otras dos áreas de competencia de la edil forista, la cooperación y la memoria histórica, y a "ese talante, esa manera de relacionarse con la oposición desde la insidia, las medidas verdades, las falsedades y las excusas, que ha dificultado establecer cualquier diálogo". Para Lorena Montes, de Xixón Sí Puede, han sido "cuatro años de pésima gestión" de la edil forista a la que también achacó la falta de planificación sobre los usos de la Escuela de Comercio o convertir el consejo escolar municipal "en un órgano muerto".

De reivindicar a su compañera se encargó la edil de Hacienda y vicepresidenta de Foro en Gijón, Ana Braña, que les dejó claro a los ediles de la izquierda dos cosas: que "esta reprobación no viene a cuento" y que la respuesta de Foro es "colocarla en el número 5 de la lista del partido que va a gobernar esta ciudad". Braña defendió que su partido ha colocado a Gijón como referente en el Norte de España de la oferta cultural y "nunca ha intentado dirigir la cultura". Un dardo al PSOE que remataría minutos más tarde la propia alcaldesa, Carmen Moriyón, pidiéndole a Lara Martínez "un poco de prudencia. Esta es su derecho de reprobar a quien quiera pero que me hable de cultura usted, que es socialista, que los socialistas desmantelaron el circuito de artes escénicas".

Por su parte Martínez reprochó a López Moro "su cobardía al defenderse por una concejala interpuesta. Tuvo la posibilidad de replicarnos y no tuvo ni esa decencia. Sólo eso ya es motivo de esta reprobación".