Una vez que el Grupo tenga en las manos el Plan director que con tanto ahínco ha elaborado, se comenzará ya a definir el futuro de la entidad a corto y medio plazo. Para ello, y teniendo en cuenta las peticiones de los socios, se abordará, si fuera necesario, la reordenación de espacios en las cuatro sedes que conforman la entidad: Las Mestas, Mareo, la playa y Begoña.
De acometerse, los mayores cambios se realizarán en las dos sedes más grandes: Las Mestas y Mareo. Más aún cuando, tras la compra de la finca La Torriente, se abre "un nuevo mundo de oportunidades" para aprovechar ese suelo. "Son miles de metros cuadrados vírgenes, cuyos usos tendremos que definir", explican desde la directiva grupista.
Para todo ello, el Grupo Covadonga realizará un concurso de arquitectos de ámbito nacional, con la intención de, "con los datos que tenemos y las posibilidades económicas de las que disponemos, creen el mejor Grupo posible". No obstante, y aunque se espera que participen arquitectos de toda España, la entidad quiere impulsar la participación también de aquellos arquitectos que sean socios grupistas.
