El joven de 25 años acusado de abusar sexualmente de una menor de edad a la que conoció en Instagram declarará esta mañana ante el tribunal de la sección octava de la Audiencia. Por estos cargos, cometidos presuntamente en mayo del año pasado en Carreño, afronta, según la petición de Fiscalía, una pena de cárcel de tres años y seis meses, cinco años de alejamiento, otro lustro de libertad vigilada y el pago de 2.000 euros por los daños morales causados. Supuestamente, el acusado quedó la menor y la invitó a subir al coche, después condujo hasta un aparcamiento donde la conminó a que le masturbase, accediendo ella "inquietada por la situación", según el fiscal.