Un joven de 22 años que este fin de semana fracturó la puerta de un portal de la calle Marqués de San Esteban y fue trasladado a Comisaría para ser identificado, quedó finalmente detenido después de causar daños a los retrovisores de varios coches estacionados en la Avenida Juan Carlos I al quedar en libertad con cargos.

Los agentes en la madrugada del sábado acudieron a la calle Marqués de San Esteban requeridos por el vecino de un inmueble que había visto como un joven rompía de una patada la puerta de cristal de su portal y huía en dirección de la Plaza del Carmen. Los policías localizaron en el lugar reseñado al denunciado que no portaba ningún documento para acreditar su filiación, por lo que fue trasladado a dependencias policiales para denunciarle por los daños intencionados causados en el edificio.

Una vez que fue plenamente identificado se comprobó que se trataba de un joven gijonés de 22 años que tenía antecedentes policiales previos por haber causado un incendio en el año 2015, aunque en esta ocasión, una vez cumplimentado el trámite de su identificación y al comprobar que no tenía ninguna reclamación judicial ni policial pendiente, se le dejó marchar sin quedar detenido.

Esta persona, al salir de la Comisaría zarandeó con fuerza la barrera que impide la entrada de vehículos no autorizados a las dependencias policiales, doblándola de forma notoria y luego echó a correr causando daños a los retrovisores de varios vehículos que se encontró a su paso por la Avenida Juan Carlos I.

Los agentes le dieron alcance antes de llegar de nuevo a la calle Marqués de San Esteban y en ese momento se resistió violentamente a ellos negándose a hacer caso a sus requerimientos. Finamente fue detenido por daños y resistencia a agente de la autoridad.