La Fundación Municipal de Servicios Sociales le acaba de dar un nuevo empujón al programa de ayudas de la renta social con la publicación de dos resoluciones más de la tercera convocatoria del programa social que más ríos de tinta ha hecho correr dentro y fuera del Ayuntamiento desde su impulso en el marco de la negociación de los presupuestos de 2017, que le permitió al gobierno de Foro evitar el no a sus cuentas de Xixón Sí Puede e IU. Estas ultimas notificaciones públicas suman 85 ayudas más concedidas a familias de la ciudad.
Eso supone que a lo largo del año en curso, se han aprobado un total de 458 ayudas del programa de renta social que suman alrededor de 886.500 euros. Las ayudas concedidas ronda el 40% de las 1.177 tramitadas a lo largo de este tiempo. Y es que en las doce resoluciones notificadas a lo largo de lo que va de año se publicitan las cuantías de esas 458 ayudas concedidas pero también las razones de la denegación de otros 719 expedientes revisados durante ese mismo periodo.
Solo cuatro de cada diez peticiones tiene una contestación positiva. Al dinero concedido, hasta un tope de 2.500 euros por familia según las bases en vigor, se le da salida a través de una tarjeta de compra que permite a los beneficiarios adquirir productos y servicios de primera necesidad en comercios locales adscritos al programa a través de la Unión de Comerciantes.
Las razones de denegación van desde haber sido beneficiario de esa ayuda de la renta social en su segunda convocatoria de 2017 a no aportar toda la documentación requerida. También hay denegaciones por no cumplir con la antigüedad mínima de empadronamiento exigida o por superar los umbrales de los ingresos por unidad de convivencia que se fijan en las bases.
La tercera convocatoria de la renta social se acordó en octubre del año pasado con la autorización de un gasto de 1,8 millones repartidos en 500.000 euros a cuenta del presupuesto del 2018 y 1,3 millones para el de 2019. A lo largo del mes de plazo para presentar solicitudes se recibieron 4.236 para la renta social aunque posteriormente se hizo una limpieza de expedientes para evitar duplicidades y errores técnicos. Al acabar 2018 se habían aprobado casi 300 ayudas de renta social.
La continuidad de la renta social, tal y como está planificada en estos momentos y ejecutado desde Servicios Sociales, es uno de los grandes debates de la campaña electoral. Con ese nombre o con otro, pero como una ayuda social finalista que implique compra e inversión en el comercio local, la están reclamando los responsables de la Unión de Comerciantes a todos los partidos en pugna por alcanzar el gobierno de la ciudad. La propia Unión plantea que la concesión de esas ayudas se vincule a todo un proyecto de inserción laboral y social de los beneficiarios. Un elemento que grupos municipales contrarios al actual diseño de la renta social ya reivindicaron.
