Construir la estación intermodal del plan de vías en el entorno del Museo del Ferrocarril "no tiene ningún sentido" y "es un error que condiciona toda la operación". Así lo aseguraron ayer tanto la decana del Colegio Oficial de Arquitectos de Asturias, Sonia Puente Landázuri, como el geólogo Cosme García en una charla que tuvo lugar en la sede del Colegio, bajo el lema "El urbanismo que viene" y en la que también participó el economista Germán Ojeda. El acto estuvo organizado por la Sociedad Cultural Gijonesa, la Unión de Comerciantes y la Federación de Asociaciones de Vecinos de Gijón.

Para Puente Landázuri, retrasar la ubicación de la instalación hasta La Calzada supone "una menor inversión" y, además, "ayudaría a solucionar un problema", el de la división en dos de la ciudad por culpa de las vías ferroviarias. La decana de los arquitectos pide "humanizar las vías", eliminando el tridente ferroviario y utilizar ese espacio liberado para potenciar el tejido productivo, con un uso mixto tanto residencial como terciario. Del mismo modo, entiende Puente Landázuri, los terrenos del solarón "piden un espacio libre y abierto". Con todo, entiende que es fundamental que el túnel del metrotrén "entre en servicio de una vez, conectando de manera efectiva todo Gijón con el área central de Asturias".

Con ella coincide Cosme García, que entiende que el plan de vías "es una operación urbanística, no de transporte" y que "un buen proyecto solucionaría una parte importante del territorio de Gijón". Precisamente por ello, las decisiones que lleva aparejadas el proceso de integración ferroviaria gijonesa "determinarán toda la movilidad de la ciudad".

Por todo esto, García explica que "colocar la estación en el entorno del Museo del Ferrocarril es un error y condiciona toda la operación", sobre todo por su excesivo coste, derivado de la complejidad técnica. "Es una ubicación fundamentalmente urbanística, pero no para el transporte" ya que "no tiene ningún sentido que la estación término se sitúe en el centro de la ciudad", aseveró.

García aseveró que, de construir la estación en este emplazamiento, "impedirá que las líneas ferroviarias desaparezcan y sigan partiendo la ciudad". Con todo, entiende que "pasadas las elecciones, seguro que se replantearán el proyecto porque no es viable ni tiene sentido".

La charla sirvió también para plantear otras posibilidades urbanísticas de futuro para la ciudad. Así, Germán Ojeda propuso construir en la fachada marítima de El Natahoyo, en los antiguos terrenos de Naval Gijón, un paseo marítimo "que conecte el oeste con el centro de la ciudad y que daría mucha vida".

Puente Landázuri aseguró igualmente que la ERIA del Piles es "el mejor espacio de oportunidad" de la ciudad, pero pidiendo que se lleve a cabo "una actuación muy pensada, no algo que sea irreversible". Los tres ponentes convergieron en la necesidad de mantener "la última joya de la corona" del litoral gijonés, frente a proyectos como la construcción de un gran centro comercial.

La decana del Colegio de Arquitectos solicitó igualmente "regenerar y rehabilitar la ciudad" con un proyecto barrio a barrio "priorizando las inversiones públicas en función de las necesidades de cada lugar", con la intención de dotar de "mayor calidad de vida a los ciudadanos".

En cuanto a la movilidad, Cosme García abogó por incluirla dentro del área de Urbanismo, y no de Tráfico, ya que, entiende, "tienen que ir de la mano, encardinados", pidiendo rehacer el plan de movilidad de la ciudad "con iniciativa política e interés".