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TINO SORIANO | Fotógrafo, presenta su libro "Ayúdame a mirar. La biblia del reportaje gráfico"

"La gente se queda con la superficie y de ahí viene la bajada de la calidad de la fotografía"

"Como lenguaje universal vale, pero en la práctica es muy complicado conseguir una imagen que valga por mil palabras"

Tino Soriano, ayer, en Gijón. MARCOS LEÓN

Tino Soriano (Barcelona, 1955) es un referente de la fotografía profesional en España. Profesor de fotografía antes que dedicarse profesionalmente a la fotografía, Soriano trabaja regularmente para medios como "National Geographic" (fotografía de viajes) y también se especializó en fotoperiodismo, con fotos publicadas en "El País" y en "La Vanguardia", entre otros medios de comunicación. A las 20.00 horas de hoy, en Laboral Ciudad de la Cultura, dentro de los XVI Encuentros Fotográficos de Gijón, presentará su libro que lleva por título "Ayúdame a mirar. La biblia del reportaje gráfico", el último de la veintena que ha escrito en solitario o en colaboración con otros autores.

- ¿La "biblia del reportaje" tiene sus "mandamientos"?

-El mandamiento más importante es la emoción, fotografiar con emoción. Luego hay una coletilla que dice que fotografíes menos y mires más. En realidad, fui profesor de fotografía antes que fotógrafo profesional y tengo cuarenta años de experiencia, por ello en el libro lo que hice fue recopilar un poco las cosas que veía que eran importantes tanto para mis alumnos como para mí.

- ¿En los últimos cuarenta años cuál ha sido la evolución de la fotografía en los medios de comunicación de España?

-Por un lado, la tecnología permite desarrollar más las habilidades y, por otro, la ingente cantidad de fotografías y el descenso de la publicidad en la prensa han dado lugar a fotografías muy aburridas.

- Habla de nuevas tecnologías, ¿dónde se encuentra más cómodo, en la fotografía analógica o en la digital?

-Es como conducir una moto y conducir un coche. La idea es que se va de un punto a otro, pero las sensaciones son diferentes. Cuando trabajábamos con analógico tenías sólo treinta y seis oportunidades, ya que habitualmente cuando cambiabas el carrete perdías tiempo, de maneera que tenías que ser mucho más selectivo. Por otro lado, había un factor que me parece muy interesante: que es el factor de abstracción, es decir, no veías lo que habías conseguido hasta al cabo de horas o años, como es mi caso. De manera que tenías que guiarte mucho por la intuición y, a la vez, afinar mucho. En cambio, hoy en día con el digital, si bien por un lado te permite experimentar y ves inmediatamente lo que haces, por otro lado es cierto que muchas personas caen en una especie de trampa perversa...

- ¿Cuál?

-Ves la foto, lo que en el respaldo de la cámara sale y tienes delante, y ya lo das por bueno, cuando en realidad esto, de alguna manera, te condena a hacer exactamente lo que pueda hacer cualquiera que tuviera una cámara y estuviera a tu lado.

- O cualquiera con un teléfono móvil...

-Claro, la gente se queda con la superficie y de ahí viene la bajada de la calidad de la fotografía, en general, aunque por descontado que hay excepciones y talentos. Pero hoy en día la fotografía se ha transformado un poco en "fast food", en el sentido de que es rápida e inmediata, cuando antes la fotografía era una creación muchísimo más abstracta, en la que tenías que intuir y dar por bueno algo que no veías y confiar en que lo habías conseguido.

- ¿Cuál es el principal "mandamiento" del fotoperiodismo, acercar la cámara a los protagonistas de la historia?

-Lo que decía Robert Capa, que si una foto no está bien es que no se hizo lo suficientemente cerca. Creo que ahora es más entender y luego el ser admitido en la medida de lo posible, es decir, fotografiar cuando sabes que lo que estás captando no deja de ser una síntesis de lo que tienes delante y con los elementos necesarios para que cualquier lector entienda el planteamiento que le estas haciendo.

- ¿Sigue siendo válido el axioma de que una imagen vale más que mil palabras?

-Como lenguaje universal vale, pero en la práctica es muy complicado conseguir una imagen que valga por mil palabras. Precisamente muchas imágenes pecan de ser demasiado banales o no incluyen la información necesaria. Conseguir el equilibrio es muy complicado.

- ¿Y para hacer buenas fotos de viajes?

-Lo esencial es contar una historia, no coleccionar imágenes sin mirar lo que tienes ante tus ojos.

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