La Confederación Hidrográfica del Cantábrico no encontró pruebas de "ningún tipo de actividad susceptible de contaminar" el cauce del río Piles. Así lo aseguran desde la entidad, dependiente del Ministerio de Transición Ecológica, basándose en los últimos análisis realizados, en noviembre del año pasado. Sin embargo, insisten en que "no tenemos constancia de que la situación haya cambiado". Estos estudios se realizaron en la parte del río Piles cuya competencia depende directamente de la Confederación, es decir, desde el último punto analizado por el Ayuntamiento -alrededor de cien metros hacia arriba del puente de Las Mestas- hasta río arriba.
En dichos análisis, la Confederación comprobó que "la calidad de las aguas era adecuada", sin encontrar "resultados significativos" de contaminación de las aguas. En estos análisis se analizan, por ejemplo, las bacterias ecoli y enterococos, las que arrojaron cifras más disparadas en los últimos análisis realizados por el Consistorio río abajo tras la aparición, la pasada semana, de animales muertos en la desembocadura del río. En aquellos análisis, las bacterias multiplicaban hasta por 48 las cifras permitidas para el baño. No así en la parte más alta del río.
Por entonces se aseguró que la muerte de los peces (sollas) se pudiera deber a un proceso natural debido a la falta de oxígeno en el agua. La proliferación de algas en descomposición habrían hecho disminuir el oxígeno en el río, provocando la muerte de los peces. Desde el Consistorio se relacionó esta cuestión con la "falta de caudal" que, estimaban, afectaba al río desde aguas arriba. Algo que, desde la Confederación ahora se descarta. "No tenemos constancia de que sea así", aseguran desde la entidad, explicando que el caudal del río no se regula con ningún tipo de presa, sino por su propio "régimen natural".
"Seguimiento regular"
No obstante, desde la Confederación se comprometen a realizar un "seguimiento regular" de la situación, repitiendo los análisis con prontitud y siempre que sea necesario. Del mismo modo, tienden la mano al Ayuntamiento para atajar el problema de la contaminación en el Piles. "Ya estamos en contacto y la semana que viene tendremos una nueva reunión", confirman desde la entidad estatal, asegurando que "tenemos que coordinarnos y, entre todos, localizar el problema para subsanarlo".
Lo que parece evidente es que, tras los análisis realizados por la Confederación Hidrográfica, se descarta que el problema de contaminación en el río Piles pueda provenir de aguas arriba, circunscribiendo los posibles vertidos contaminantes a la zona más cercana a la playa, entre el puente de Las Mestas y San Lorenzo, la zona que es jurisdicción del Principado de Asturias, al estar declarada como "dominio público marítimo terrestre".
Cabe recordar que el concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Gijón, Aurelio Martín, ya había advertido que desde el Consistorio tenían "sospechas fundadas" de vertidos al río. Descartado con las analíticas que se pudieran haber producido río arriba, es evidente que tienen que producirse en la zona más cercana a la desembocadura.
Precisamente, el Ayuntamiento había encargado el pasado lunes unos nuevos análisis a la Empresa Municipal de Aguas, cuyos resultados estaba previsto que se conocieran ayer. No obstante, desde el Consistorio se prefirió ayer realizar más análisis con la marea contrapuesta para poder disponer de unos datos con mayor veracidad. Es empeño de la concejalía del ramo tener una "total transparencia", así como solucionar el problema.
Por otro lado, desde la Confederación Hidrográfica del Cantábrico se quiso dejar claro que las competencias de limpieza y conservación del cauce de los ríos en la zona urbana es una competencia exclusivamente municipal. Igualmente, depende de los ayuntamientos el saneamiento de las aguas. No obstante, remarcan que la colaboración para la solución del problema es "total".
