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Un colegio de Gijón, inundado y con el agua al cuello

Las familias de Jove denuncian la inundación de la planta baja del centro con las lluvias de estos días por una arqueta que rebosa en el comedor

Llueve sobre mojado en el colegio de_Jove. Las precipitaciones torrenciales del pasado martes anegaron la planta baja de un centro escolar que acumula numerosos desperfectos y problemas asociados a su antigüedad y a la falta de mantenimiento de las instalaciones, tal y como denuncian las familias._La tromba de agua en la mañana del martes es una nueva queja a la larga lista de deficiencias sobre las que alertan los padres, y que en esta ocasión alteró el discurrir normal de la actividad escolar.

Las lluvias hicieron saltar un registro ubicado en el comedor escolar, una localización "completamente anormal con la que no se ha hecho nada desde que empezamos a denunciarlo, y cada vez que llueve sale agua por le registro", lamenta Eva Fernández, del Ampa del centro. El martes, el agua salió en tromba e inundó el comedor y toda la planta baja del colegio, lo que hizo que se suspendiera el servicio de las comidas de mediodía y las extraescolares de primera hora de la tarde, obligando además a avisar a todas las familias para que pasaran a recoger a los niños porque el colegio estaba impracticable.

Ayer no hubo que lamentar problemas porque apenas llovió, pero los padres temen que en los próximos días se repitan los problemas, ante la previsión de mal tiempo y de nuevas lluvias copiosas. "Es indignante porque para este colegio nunca hay dinero", lamenta Fernández, ante la constatación de que "de todos los problemas de los que llevamos años avisando, apenas nos han arreglado un baño y han parcheado con la pintura" . Ni rastro de las nuevas ventanas comprometidas, porque las actuales son de madera y "con contraventanas por las que se cuela todo el frío". El Principado habilitó una partida de 35.000 euros a finales del curso pasado tras siete años de lucha, pero "siguen sin colocar, y cada vez que nos interesamos por las obras la consejería nos da largas, es desesperante", asegura la madre, "cansada" de pelear por conseguir que se atiendan las necesidades de uno de los centros más antiguos de Gijón.

Entre ellas, la limpieza del tejado y del patio, que se llena de polvo por el tráfico pesado en la zona y la proximidad de El Musel. Y ahora, con el temporal, la presencia de un árbol rajado en las inmediaciones del centro que "está a punto de desplomarse". "Hemos avisado al Ayuntamiento pero seguimos esperando, a ver cuánto tardan", critican los padres, que sopesan salir a la calle para defender sus derechos.

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