El Ayuntamiento de Gijón presentó esta mañana los nuevos parquímetros que inundarán la ciudad. Se trata de 230 dispositivos "de última tecnología" que vendrán a sustituir a los actuales. La principal novedad es que ahora, para obtener el tique de aparcamiento, es obligatorio introducir la matrícula del vehículo, para poder llevar así un mayor control.

Un control que también se verá aumentando merced a la puesta en marcha de dos vehículos con cámaras, que podrán leer matrículas "de día y de noche, de coches parados o en movimiento y en ambos sentidos", según explicó el concejal del ramo, Aurelio Martín, de IU. Los vehículos, 100% eléctricos, servirán de "apoyo" a los controladores.

Cada uno de los parquímetros tiene un coste de 6.000 euros y cada uno de los vehículos, con las cámaras y el sistema operativo, cuesta 50.000 euros. Además, los parquímetros permiten todo tipo de pago: monedas, tarjeta o incluso con el teléfono móvil.

Los nuevos dispositivos se comenzarán a colocar en dos semanas en el barrio de Laviada y se harán extensibles, progresivamente, a toda la ciudad, con la intención de que estén plenamente operativos en todo el territorio en un plazo aproximado de medio año.