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La apuesta municipal para las personas sin hogar: viviendas en edificios sin uso

La ampliación del parque de pisos y un estudio más profundo de quienes duermen al raso, algunas de las medidas que se plantea el Ayuntamiento

La apuesta municipal para las personas sin hogar: viviendas en edificios sin uso Marcos León

Políticas de prevención y un plan de acción efectivo con más viviendas para las personas sin hogar. Tras la presentación de los demoledores datos sobre personas sin hogar en Gijón, con 439 vecinos sin techo, de los que 142 duermen en la calle, entidades públicas y asociaciones se empiezan a movilizar a la búsqueda de soluciones.

La propia alcaldesa apostaba en la presentación de los datos por recuperar la colaboración con el tercer sector, y por "liderar el proceso que garantice los derechos de todas las personas haciendo un estudio sobre vivienda, considerando que la vivienda es un punto de anclaje fundamental para tener una vida digna"

Y la gerente de la Empresa Municipal de la Vivienda (EMVISA), Susana González, va un paso más allá. "La administración tiene la responsabilidad pública de garantizar los derechos sociales y la igualdad de oportunidades a todos los ciudadanos", recalca González, y por eso "veo necesario una Estrategia municipal de erradicación del sinhogarismo, a medio y largo plazo, que recoja un modelo de intervención basado en derechos y que permita restaurar los proyectos vitales de las personas sin hogar", recalca la gerente, consciente de la dureza de los datos del conteo nocturno de esta semana.

El trabajo que propone la responsable de Vivienda pasa por una estrategia que coordine a todos y por tanto, "en la que las políticas de vivienda y las políticas de servicios sociales estén en interacción y coordinación permanente así como con el tercer sector que trabaja en el municipio y que se articula a través de la Red de Inclusión Activa". Una estrategia que "huya de soluciones temporales para las personas sin hogar y se enfoque hacia la vivienda como solución definitiva", considera Susana González, con fórmulas en mente que apuntan al "Housing First" y a la ampliación del parque de viviendas.

Por un lado, la responsable propone continuar con el estudio de la realidad de la exclusión residencial e incorporar datos, por separado, de todas las categorías: personas sin techo, sin vivienda, con vivienda insegura o en vivienda inadecuada, "que es lo que nos permitirá desarrollar a posteriori políticas de vivienda más ajustadas a las diferentes realidades de exclusión residencial".

Una vez conocida esta realidad en la ciudad "el primer problema es abordar la vivienda", reflexiona González, por lo que "se deberían vincular la Estrategia de erradicación del sinhogarismo a un estudio del parque de vivienda en Gijón, sus diferentes tipologías, su modelo de gestión y el acceso a las mismas". Y además "complementar toda esta información con encuestas a las personas sin hogar, porque es necesario saber más sobre las personas en situación de calle, no solo cuantas personas pernoctan o utilizan servicios de la Red sino también sus características, problemáticas y necesidades expresadas por ellos mismos".

Por otro lado, Emvisa apuesta por contar con más viviendas. "Tenemos que buscar fórmulas para ampliar el parque de vivienda público con el aprovechamiento, la rehabilitación y transformación en vivienda de equipamientos, edificios sin uso que ofrezcan soluciones de vivienda definitivas", reconoce la gerente, que también llama a "hacer una reserva de vivienda pública para programa Housing First, es decir, para personas en situación de calle permanente y habitual". Otras medidas que contempla serían mejorar y aumentar el programa de ayuda al alquiler e implementar la mediación en vivienda para favorecer el buen entendimiento y el mantenimiento de la vivienda, así como valorar medidas e incentivos para garantizar unos precios de alquiler asequibles.

Y finalmente, "la construcción, transformación o adaptación en vivienda de inmuebles y recursos para personas por parte de las entidades no lucrativas y reflexionar todos sobre un cambio de modelo en la intervención y atención directa: el acompañamiento social desde una vivienda", recalca González porque "sólo así se podrá poner en marcha una estrategia de acción conjunta con una clara voluntad de afrontar la realidad".

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