No solo de enmiendas presupuestarias se nutre el acuerdo que negocian PSOE e IU desde el gobierno municipal y Podemos-Equo desde la oposición con el objetivo de que el Pleno del próximo miércoles cierre sesión con un presupuesto aprobado para 2020. Un presupuesto de 233 millones para el Ayuntamiento que se eleva a 320 si se contabilizan los dineros de las empresas municipales. El primer presupuesto tras la recuperación de la Alcaldía para la izquierda.

Más allá de los cambios por 1,5 millones incorporados ya al presupuesto por enmiendas aceptadas a Podemos, el acuerdo que hay sobre la mesa plantea una visión más global de la acción política del próximo año a partir de la asunción de otros compromisos. Algunos con coste económico. Otros no. La lista de reivindicaciones de Podemos-Equo para este acuerdo empieza por afianzar esa nueva renta social que ya se hizo hueco en el presupuesto, vía enmienda, con un millón pero para la que se pide otro cuando lleguen los remanentes. Dos millones para 2020 con el compromiso de su puesta en marcha en abril tras "un trabajo conjunto de redefinición".

Sin salirse del ámbito social, Podemos-Equo quiere estar en la mesa de trabajo que elabore la nueva ordenanza de servicios sociales con especial interés en la regulación del servicio de ayuda a domicilio, cuya remunicipalización fue lucha de Xixón Sí Puede.

Las escuelas infantiles son otra prioridad de Podemos.No salió adelante, ya que no fue admitida por criterios técnicos, la enmienda en favor de su gratuidad pero el objetivo sigue vigente. Las "compensaciones" pasarían por habilitar una línea de 100.000 euros para ayudas a las familias de los pequeños y otros 100.000 para obras de conservación y mantenimiento. Al soporte económico de futuras modificaciones presupuestarias quedarían, por ejemplo, las opciones de dar 150.000 euros más a la Empresa de la Vivienda (Emvisa) -50.000 para reparación de viviendas públicas y 100.000 para comprar más-y otros 50.000 euros para la colocación de cámaras de vigilancia de la contaminación.

Hay compromisos que no van unidos a una cifra económica, de partida, como la convocatoria en el primer trimestre del año de los consejos de distrito para analizar las previsiones del plan de barrios, la articulación de un sistema de traslado a los grupos municipales de la información que surge en foros como Gijón al Norte o la comisión del litoral, la agilización de la convocatoria de plazas de conductores de Emtusa, una campaña de sensibilización sobre la necesidad de poner chip a perros y gatos y el impulso de una mesa de trabajo que elabore un plan director de instalaciones deportivas. Todo ello se sumaría a lo ya incorporado en la comisión de Hacienda con las enmiendas como 76.000 euros para un festival de cultura atlántica, 150.000 para la remodelación de Rodríguez Sampedro, 50.000 para carriles bici y 250.000 para mejoras en paradas de bus.