Se ganó la confianza de una joven gijonesa tras una noche de fiesta y hasta se ofreció a acompañarla a casa para que no fuese sola, pero las verdaderas intenciones de un joven argentino de 18 años, que ha sido detenido, era el de robarle el teléfono móvil. Ahora, este individuo, al estar en situación irregular en España, afronta su expulsión del país.
El arrestado entabló conversación con una joven gijonesa en un bar de copas y tras un rato juntos él se ofreció a acompañarla hasta casa. "Tras unos minutos de paseo, y de charla cordial", explica la policía, el joven le arrebató el teléfono que ella llevaba en la mano mientras le decía "yo no tengo móvil así que te quito el tuyo". Después, echó a correr mientras ella llamaba a la Policía Nacional.
Los agentes localizaron al sospechoso en la estación de autobuses, pero echó a correr por la calle Magnus Blikstad al verles. Le siguieron por el barrio de Laviada, pero la búsqueda no dio resultado. Eso sí, le esperaron en la estación y allí volvió para coger un autobús a Oviedo. Fue detenido y el móvil recuperado al localizarlo en una alcantarilla tras una intensa búsqueda por toda la zona.
