La avenida del Molinón ya es pasado. Hace meses que la calle con dos carriles para coches y dos líneas de aparcamiento desapareció por las obras del pozo de tormentas del parque de Hermanos Castro. No volverá al viario gijonés. El plan del gobierno es convertir ese espacio en una zona verde con un gran paseo peatonal e incorporarlo al parque de Isabel la Católica, que se extenderá sin interrupciones hasta el Piles. Sí se recuperará el circuito del "kilometrín".

"Puede parecer una obra pequeña pero es muy simbólica: vamos a convertir cemento en parque. No sólo es ampliar el parque, también es mostrar la hoja de ruta de este gobierno en cuanto a devolver el suelo público a los peatones", explicó Aurelio Martín en un discurso con referencias a la Cumbre del Clima que se celebra en Madrid "No hay mayor compromiso que las acciones", remató.

El edil de Movilidad y Medio Ambiente hizo la presentación de este proyecto junto al concejal Olmo Ron, en su doble condición de responsable de Mantenimiento y Obras Públicas y presidente de la Empresa Municipal de Aguas. El coste estimado de la obra es de 1,3 millones y su financiación será compartida por la EMA y por Acciona, que como adjudicataria de la obra del pozo de tormentas debe reponer los elementos deteriorados en superficie. Si no hay problemas, el trabajo paisajista sobre la avenida del Molinón podría empezar a mediados del año que viene. La duración de la obra se estima en unos seis meses.

¿Y qué pasa con los coches? Pues tendrán que seguir utilizando Torcuato Fernández-Miranda y la avenida de la Costa, como se hace ahora. De hecho, el gobierno asegura que ver la escasa repercusión en el tráfico de no disponer de la avenida del Molinón -incluso en pleno verano con la Feria de Muestras y con actividades importantes en El Molinón como el partido de la selección española - abrió la posibilidad a esta idea . "Al final la avenida se queda en un aparcamiento, nada más", aseguran. Al tiempo que recuerdan la disponibilidad para el estacionamiento que hay en la zona con el espacio que rodea El Molinón y, en el futuro, sobre el nuevo pozo de tormentas.

El diseño de Parques y Jardines plantea un gran paseo central arbolado de 4,5 metros de ancho entre la avenida de Castilla y la rotonda que conecta con la calle Luis Adaro, que serviría también de vía para el acceso de vehículos de emergencias, y que se completaría con una veintena de zonas de estancia con mobiliario accesible y conexiones con accesos peatonales. La operación reordenaría unos 12.000 metros cuadrados generando un "corredor ambiental sirviendo de nexo de unión entre el río Piles y el propio parque". Esta ampliación se sumaría al proyecto de mejora y limpieza del parque ya diseñado con un plan a cuatro años y un coste de algo más de 1,6 millones. "Entre uno y otro, cerca de tres millones", destacó Olmo Ron.

Foro ya ha anunciado que pedirá los informes que "respalden la decisión de peatonalizar una vía tan concurrida y con unos 200 aparcamientos. Desde que se inició la construcción del pozo de tormentas y se cortó el acceso de vehículos se generan muchos trastornos principalmente para llegar a la autopista o para ir al entorno de la milla del conocimiento. Algo que en verano fue mayor aún", asegura Jesús Martínez Salvador.