El espíritu de la Navidad invade ya cada recoveco de la iglesia parroquial de San Pedro, que ayer inauguró su tradicional belén durante una ceremonia religiosa y musical con las actuaciones de la Banda de Música de Mieres y el Orfeón de San Lorenzo. "El deseo es que la Navidad no se pierda, porque ha traído alegría, amor, solidaridad y paz a la sociedad; a ver si puede competir con eso el solsticio", reflexionó el párroco Javier Gómez Cuesta después de la concurrida inauguración. El templo gijonés, además, luce ya desde hace unas semanas unas luces navideñas que recrean el momento de la natividad.
El intenso trabajo de elaboración del belén culminó ayer por la tarde con su bendición y la aprobación de los feligreses. La obra que representa el nacimiento de Jesús lleva la firma de Antonio Braga y José M. Guadamuro. "Ellos piensan una idea todos los años que comienzan a luego a desarrollar y a enfocar creando figuras con corcho, porexpán y pasta; luego trabajan durante todo el año hasta que en noviembre intensifican su labor", explica Javier Gómez Cuesta. El párroco de San Pedro bromea con que la construcción de este año reproduce "un belén city", en vista de que "hay mucha edificación y poco prao para tantas ovejas". "Los efectos lumínicos son también muy guapos", añade el sacerdote.
Junto al belén también hay un libro de firmas para que los visitantes y feligreses puedan compartir deseos e impresiones por escrito tras contamplar a la mula y el buey, entre otros personajes típicos.
La sesión navideña del sábado en San Pedro comenzó con buena música desde las seis de la tarde. Con puntualidad. El Orfeón de San Lorenzo, que contó con la compañía al piano de Alicia Ordiz Calvo, interpretó "Tú no sabe inglé", de Emilio Grenet y N. Guillén; "Villavinco Napolitano", de Perosi; "A Festive Gloria", de Jay Althouse; y "Leyenda del segador", de Jesús Gavito Feliz. Una elección que resultó del agrado de los fieles.
Homilía
El repertorio de la Banda de Música de Mieres, por su parte, incluyó "Sadness and Sarrow", "Leyendas de pasión", "El Presidente" y "Sisco". Luego, junto al Orfeón de San Lorenzo, deleitaron a los presentes con "No hay tal andar", "Flor de Navidad", "Llegó Navidá" y popular canto de Victor Manuel, "El portalín de Piedra". Ambas agrupaciones contribuyeron notablemente a que el espíritu de la Navidad se instalase ya en San Pedro.
El inicio musical también dejó paso a la homilía de Javier Gómez Cuesta, donde transmitió los buenos deseos a sus feligreses en estas fiestas y también las virtudes de la Navidad. "Alegría, amor, solidaridad y paz" es la receta del párroco.
