Si hay algo que caracteriza a las épocas navideñas, además de la decoración o la bajada de las temperaturas, eso es sin duda la solidaridad. Así se demostró, un año más, en el colegio Corazón de María y su parroquia, donde han realizado la ya tradicional Operación Kilo para recoger alimentos imperecederos para los más necesitados.

Desde hace más de dos semanas, cientos de familias gijonesas han ido depositando progresivamente en ambos centros claretianos -colegio y parroquia- sus bolsas con productos de aseo y comestibles con los que la Parroquia del Corazón de María de Gijón atiende cada año a más de un centenar de personas en situación de riesgo de exclusión social o vulnerabilidad, así como a varias instituciones gijonesas de caridad repartidas por toda la ciudad.

Aunque el punto álgido de esta Operación Kilo llegó con una multitudinaria recogida por el barrio de La Arena, donde casi tres centenares de voluntarios claretianos pudieron recoger cientos de bolsas de enseres y alimentos, durante toda la colecta se siguió un buen ritmo de donaciones.