Unos encontraron allí el amor de su vida. Otros asistieron al concierto de uno de sus ídolos. Muchos festejaron la fiesta de final de curso, una boda, un reencuentro de amigos... Pocos son los gijoneses de muchas generaciones que no tienen un recuerdo enmarcado entre las paredes de El Jardín, la popular discoteca en la que los hermanos Corsino y Fernando García-Rendueles convirtieron el merendero familiar fundado a finales de la década de los cuarenta del siglo pasado.

De inmortalizar esos recuerdos y el paso por el local de las grandes estrellas del momento con su cámara se encargó durante décadas Corsino, un gran aficionado a la fotografía. Falleció en septiembre de 2016 a los 78 años. Tres años después que su hermano Fernando. Ahora esas imágenes y los recuerdos que atesoran pasan a integrarse en el archivo municipal gracias a la donación de la familia. Son alrededor de 8.100 negativos fotográficos y 58 cintas de vídeo con horas y horas de grabación que serán catalogados, digitalizados y expuestos a todo el mundo a través de la web municipal. Cuando todo ese trabajo esté hecho llegará el momento de decidir si el material sirve para hacer una exposición, un libro, ambas cosas...

Nada está decidido y nada está rechazado, explicó ayer la alcaldesa, Ana González, en el acto oficial de recepción de todo ese material. A su lado en el salón municipal, la viuda de Corsino, María del Carmen Iglesias Colao, sus hijos Corsino y Fernando García-Rendueles Iglesias y sus tres nietos, entre otros miembros de la familia y representantes de los distintos grupos municipales de la Corporación. Para Ana González el propio proceso de transformación de El Jardín de merendero a centro de ocio ejemplifica la evolución del Gijón y los gijoneses y las fotografías que iba realizando Corsino García-Rendueles se han convertido con el paso del tiempo en un testimonio de "cómo se divertía la ciudad, cómo se relacionaban sus habitantes, cómo vestían o qué música escuchaban". Los recuerdos de El Jardín son "recuerdos compartidos" con toda Gijón. Y ahora más al pasar a formar parte del archivo municipal.

La Alcaldesa, acompañada por la edil Salomé Díaz Toral, agradeció la generosidad de la familia y la familia, a través de Corsino hijo, agradeció el interés municipal por asumir, cuidar y hacer público el legado de su padre. "Mi padre fue un hombre que hizo mucho por la ciudad desde la sala de fiestas, a la que dedició toda su vida; que se le reconozca y recuerde en un orgullo", explicó García-Rendueles, que festejó la posibilidad de que todas esas imágenes, y los sentimientos y recuerdos que albergan, puedan ser disfrutados por todos los gijoneses.