El camarero de una sidrería del barrio de El Llano resultó detenido el pasado lunes por un delito contra la salud pública después de que le sorprendiesen con 24 gramos de hachís tras vender varias papelinas a unos clientes y 210 euros provenientes de tráfico de sustancias estupefacientes. El individuo, de origen marroquí, cuenta con antecedentes por el mismo delito. De hecho, su historial fue clave para que los agentes de la Policía Nacional le reconociesen por intervenciones anteriores. Los policías, además, vieron como el ahora arrestado se metía en el baño con uno de sus clientes, luego salía y, poco después, volvía a entrar con otro hombre.
Los agentes identificaron a los compradores de la droga, pudiendo confirmar sus sospechas al incautarles varias papelinas con unos dos gramos de hachís. Fue entonces cuando los policías entraron al establecimiento hostelero para registrar al sospechoso, al que incautaron 24 gramos de hachís que llevaba escondido en la zona genital. También llevaba dinero proveniente del tráfico, por lo que fue detenido acusado de un delito contra la salud pública.
