El Principado ha confirmado hoy la paralización de la subasta del ara de la Fortuna Balnearia después de haberse aprobado en el consejo de Patrimonio Cultural el inicio de los trámites para declarar la pieza como Bien de Interés Cultural (BIC). Según la administración regional, la medida surge "con el fin de reforzar la protección con que cuenta actualmente y posibilitar que desde el Estado se pueda considerar la pieza inexportable" y se justifica por "el valor histórico excepcional y especial importancia para la historia de Gijón y Asturias" del ara, cuyo actual propietario es el exedil del Partido Popular Manuel del Castillo.

Según informó la consejería de Cultura mediante nota de prensa, "la pretensión de la propiedad de vender esta piezay la normativa fijada en la Ley de Patrimonio Cultural de Asturias". Fruto de las gestiones regionales, que contaron con la colaboración del Ministerio de Cultura, "se ha logrado que la pieza no se incluya en la subasta anunciada para el 5 de febrero".

El ara de la Fortuna Balnearia fue encontrada en 1820, hace ahora doscientos años, en el barrio de La Mortera, en Tremañes (Gijón). La lápida es un bloque paralelepípedo de arenisca en la cual se distribuye un texto repartido en siete líneas, enmarcadas la superior por una cenefa moldurada y dos rosetones. En la parte inferior, bajo la cenefa igualmente moldurada, se representa un adorno geométrico de semicírculos concéntricos. Según el Principado, "tanto la parte inferior como la superior de la pieza se encuentran deterioradas".

El texto cuenta con un trazado regular y letra bien definida, lo que apunta una cronología aproximada de época flavia. La inscripción se estima que reza: T(itus) Pompeius Peregrinianus a(ladiosa). Y se puede traducir al castellano como: Fortuna de los baños, para su salud y la de los suyos.