Los centros de salud gijoneses incorporarán de inmediato a siete nuevos pediatras. Dos de los puestos serán cubiertos con vacantes, que permiten una mayor estabilidad laboral y un cupo de pacientes estable, y los cinco restantes firmarán un contrato de doce meses. La medida, aunque aplaudida en parte por los sindicatos, ha provocado malestar en el sector facultativo, que esperaba que la oferta fuese mayor. "Los pediatras están muy demandados y fuera de la región están dando condiciones mejores", advierten.

Las dos vacantes se adjudicarán a al centro de salud de Laviada y al de Contrueces, que acogerá también a un eventual junto con los ambulatorios de Parque-Somió, Montevil y El Coto. El séptimo pediatra, sin embargo, se dedicará a rotar por todo el área para hacer sustituciones, un puesto que, a juicio de los eventuales sin contrato, resultará insuficiente. Un grupo de afectados, de hecho, estudia ahora presentar una queja formal a Sanidad.

El Sindicato Médico (Simpa), sin embargo, matiza que la medida no tiene por qué ser definitiva. "Están intentando cubrir huecos sin desabastecer las áreas menos pobladas; se podrán hacer reajustes", explica. Por este mismo motivo el área V sigue de momento sin instrucciones para asignar las doce plazas de interinos de médicos de familia, un trámite ya finalizado en Avilés y Oviedo. "La gerencia se está tomando su tiempo porque quieren darles cierta estabilidad laboral para que no haya cambios bruscos cuando se resuelva la oposición de 2018", aclaran.