El Museo de la Gaita, que complementa como instalación autónoma la del Muséu del Pueblu d'Asturies, acaba de adquirir cuatro instrumentos que permitirán una visión más amplia del poco conocido mundo sonora de Europa oriental. Las piezas proceden de Bulgaria, Bosnia y Herzegovina y Rumanía.

Esos instrumentos son una "gaida" y un "kaval" búlgaros, así como un "mih" rumano y una "caraba" o puntero rumano. Pasarán a formar parte de la colección permanente del Museo de la Gaita. La "gaida" es una gaita aguda equivalente a la "grillera" asturiana, mientras que el "kaval" es una flauta de gran popularidad en Bulgaria. La "caraba", que procede de la provincia rumana de Vrancea, es, en realidad, un puntero de gaita hecho a navaja. José Benito Nava Monroy, gaitero mexicano de origen asturiano, compró el "mih" (gaita de Bosnia y Herzegovina) que luego donó al museo gijonés.