"La gente quiere un cambio". Ese es el mantra que el empresario deportivo Pablo Jove lleva repitiendo con ímpetu desde su postulación a la presidencia grupista. El aspirante intentará arrebatar la presidencia a Corripio con unas líneas de trabajo muy marcadas: integrar al socio en las decisiones de la entidad, modernizar la administración y aportar ideas novedosas.

Para ello, Jove cuenta con una candidatura conformada por los ingenieros Lucía Suárez, Nuria Jove y José Luis Suárez, la abogada Tania Fernández Navas, los profesores de la Universidad de Oviedo José Luis Sampedro y Javier Izquierdo, el expresidente del Club Balonmano Gijón José María Gutiérrez y el empresario Alejandro González de Prado.

Entre su programa electoral, destacan medidas novedosas, como la idea de trasladar las oficinas del club a la finca La Torriente, construir más pistas de pádel para evitar la saturación actual, dar más voz al socio, permitiendo que pueda votar de forma on-line en las asambleas o reducir los gastos corrientes de la entidad.

Una de las propuestas más potentes es la realización de una auditoría energética, con el fin de reducir el consumo energético o colocar paneles solares para buscar el autoabastecimiento. Además, prevé crear varias plazas de aparcamiento exclusivas para vehículos eléctricos, con sus correspondientes puntos de recarga.

A ello se suman otras ideas como el ofrecer una mayor atención a las instalaciones de Mareo, reducir el coste de los cursillos deportivos o mejorar la entrada de la zona de Viesques. Del mismo modo, Jove prevé crear la figura de herederos del Grupo, de tal forma que cada socio de Honor, a su fallecimiento, generará un derecho de admisión a la entidad sin lista de espera, que podrá ser utilizado por su familia o vendido a un tercero.

Desde que anunció su intención de presentarse a las elecciones grupistas, Jove aseguró querer "despolitizar" el Grupo, enfatizando que "la gestión es mejorable", por lo que quiere "dejar el Grupo en manos de profesionales". Igualmente, Jove busca evitar los "continuos procesos judiciales" en los que está inmerso el club.