Sí a que la Universidad Laboral opte a la concesión de la declaración de patrimonio mundial por parte de la Unesco pero "con una condición: que lo contemos todo. Nosotros no nos avergonzamos de la Laboral pero no podemos negar su punto de partida, quien la construyó y para qué". Ana González, alcaldesa de la ciudad, incluía esta reflexión en su anuncio de que el PSOE llevará al próximo pleno una proposición para "instar al gobierno del Principado a la apertura del expediente oportuno al efecto de impulsar la declaración por la Unesco de la Universidad Laboral como patrimonio cultural de la humanidad teniendo en cuenta no solo su condición de símbolo y reflejo de un régimen dictatorial, y por tanto recordatorio insoslayable de un periodo de nuestra historia que en ningún caso puede volver a repetirse, sino también su valor artístico y la potencialidad de sus usos como espacio de convivencia en aras de la contribución colectiva a la resignificación del edificio".

Solo hace tres días el PSOE votaba en contra, al igual que IU y Podemos, de una iniciativa del PP en favor de esa misma declaración y de un plan de usos y mejoras de mantenimiento del edificio. Los votos de la izquierda tumbaron la iniciativa en todos sus sentidos. Una iniciativa, la popular, que González aseguró que se había rechazado desde el PSOE por limitarse defender el valor estético de la pieza arquitectónica. El resultado de la votación generó un amplio debate social con opiniones en todos los sentidos aunque los defensores de esa declaración cargaron directamente contra la Alcaldesa.

González explicó en su comparencia de esta mañana -sola en el salón de recepciones del Ayuntamiento- que no fueron capaces de explicar bien los argumentos de su decisión y asumió como error personal no haber planteado una enmienda al texto del PP que hubiera aclarado el posicionamiento socialista. Igual que como suya defendió la idea de presentar esta iniciativa que hizo hoy por motivos de agenda. ¿Presiones a lo largo de estos días de agrio debate? "No aunque no soy inmune al debate público", confesó.

González acompañó sus explicaciones de una serie de datos sobre los elementos que la Unesco pide para estas declaraciones y de una amplia reflexión sobre la historia de la Laboral desde su gestación en 1945 como espacio para "instruir en las doctrinas de la Revolución Nacional" a su resignificación como Ciudad de la Cultura a partir de un proyecto del gobierno del Principado de Asturias bajo el liderazgo del socialista Vicente Álvarez Areces.