Antonio Corripio tomó ayer posesión de su cargo como presidente del Real Grupo de Cultura Covadonga tras haber sido reelegido en el cargo en las elecciones del pasado domingo con 3.620 votos, frente a los 1.210 de su adversario, Pablo Jove. Por delante, otros cuatro años de mandato que, aseguró el propio Corripio, comienza "con más ilusión que el primero".
Uno de los principales retos que se plantea en su nueva etapa como presidente es solucionar la disputa abierta con el Ayuntamiento a raíz del anuncio consistorial del cierre del anillo navegable del Piles. El concejal de Deportes del Ayuntamiento de Gijón, José Ramón Tuero, aseguró ayer al finalizar el acto que "se están planteando" emplazamientos alternativos para la práctica del piragüismo en la ciudad "y haberlos, los hay".
El planteamiento del gobierno local de cerrar el anillo navegable del río Piles, al que apuntan como principal responsable de los episodios de contaminación que suceden en la playa de San Lorenzo, chocó de bruces con la entidad grupista, que alzó su voz para frenarlo. De hecho, desde el Grupo Covadonga se están realizando una serie de estudios independientes que se contrapondrán a los realizados por el Consistorio, con la intención de evitar el cierre definitivo de la instalación.
"Es un problema de salud pública en una instalación deportiva municipal que gestiona el Patronato", por lo que "desde el área de Medio Ambiente plantearon que hay que priorizar la limpieza del río para hacer desaparecer ese problema", explicó Tuero. Con todo, el edil socialista adelantó que "se están planteando alternativas, y las hay" para la práctica del piragüismo en otro emplazamiento, aunque reconociendo que es el mejor lugar para la iniciación en este deporte: "es una instalación idónea, hay pocas como estas". Eso sí, "lo primero es limpiar el río", incidió el concejal tras la toma de posesión de Corripio. Así lo entiende también la Directora General de Deportes del Principado, Beatriz Álvarez, que quiso dejar claro que "lo ideal para el deporte asturiano y el piragüismo es que se pueda recuperar ese espacio" del Piles.
El presidente grupista, reelegido por abrumadora mayoría, aseguró en su discurso de ayer que "al igual que hicimos en el primer mandato, volcaremos toda nuestra ilusión para convertirla en logros que redunden en ese futuro de legados que estamos obligados a dar en herencia a nuestros hijos", aseguró a los asistentes, entre los que se encontraban los presidentes de otros clubes deportivos de la ciudad, como Jesús Kocina, del Club Hípico Astur, y Secundino González, del Club Natación Santa Olaya.
Corripio, además, remarcó que en este segundo "y último" mandato la situación es distinta a la que se encontró a su llegada a la directiva de la entidad hace cuatro años. "Entonces nos tocó arrancar desde cero, con muchos retos que superar y muchos problemas que sortear. Ahora, con el Grupo perfectamente ordenado, el futuro que se nos abre no puede ser más extraordinario", auguró.
Corripio remarcó también que "nuestro Grupo está entre las mejores sociedades polideportivas del mundo. Consolidados en el presente, rigurosos con los presupuestos y sabedores de la solidez de los proyectos a afrontar, vamos a seguir evolucionando con imparables retos", prometiendo "una entrega sin cortapisas, con absoluta responsabilidad". Además, quiso enfatizar que "por encima de todo somos una sociedad deportiva", por lo que "quiero reiterar nuestro compromiso con el deporte. Seguiremos apostando por el deporte en su máxima esencia y en todas sus extensiones con la participación de todos los socios".
Así lo creen también tanto Tuero como Álvarez, que aseguraron que el Grupo "es uno de los mejores clubes de Europa, hay que decirlo alto y claro. Y tenemos la suerte de tenerlo en Gijón, es un orgullo para la ciudad". La entidad, según explicaron, recibe alrededor de 50.000 euros de subvención municipal y del orden de 22.000 del Principado.
