Los representantes vecinales de las parroquias de Fano, Vega, Caldones y Lavandera aceptan unirse al frente común que plantea Baldornón, tal y como avanzó LA NUEVA ESPAÑA, para impulsar medidas conjuntas que alivien el problema que genera el tráfico pesado de camiones entre los puntos kilométricos 10.5 y 5.2 de la AS-377 procedentes de la mina de Viesca. Consensuar con los propietarios de la explotación, ubicada en la localidad sierense de La Vega pero que discurre por el subsuelo gijonés, una reducción del tamaño de los transportes gana enteros como medida común.
También está la propuesta esgrimida por Horst Winter, el presidente de la Asociación de Vecinos "La Raposa" de Baldornón, de reducir la velocidad de 50 a 30 kilómetros por hora en ese punto de la travesía. "Si se baja la velocidad, el tráfico será muy lento. Es mejor que haya camiones más pequeños", planteó la presidenta de la Asociación de vecinos "El Carbayu" de Caldones, Isabel Fano. "Desaconsejo bajar la velocidad porque se formarán caravanas", añadió Jorge Manuel Rodríguez, de "El Peñón" de Fano. "La vía es demasiado estrecha y hay que buscar solución", prosiguió José Antonio Piñeira, de "San Julián" de Llavandera. "Nos reuniremos entre todos y quizás fuera bueno plantear el tema al Ayuntamiento", zanjó Xuan Pandiella, de "San Emiliano" de Vega.
