El joven gijonés de 20 años acusado de agredir sexualmente a una chica de 22 a la que asaltó de forma sorpresiva hace un año en la calle Espronceda no solo niega los cargos sino que asegura que a la hora de los hechos se encontraba en casa de su novia, con sus suegros presentes, en una vivienda del barrio del Polígono. En cambio, la denunciante, que está a tratamiento psicológico desde que sufrió la agresión, le volvió a reconocer ayer "sin género de dudas" como su agresor. El juicio, celebrado a puerta cerrada en Gijón, quedó visto para sentencia.

El procesado, que responde a las iniciales D. S. S. B., fue el primero en entrar a la sala de vista y lo hizo para defender su inocencia. "No negamos que exista el delito, pero sí decimos que ha habido un error en el reconocimiento del joven, porque a la hora que ocurrió esa agresión él estaba en casa con su novia y sus suegros, tal y como hemos podido acreditar con fotografías tomadas a la hora a la que ella dijo haber sufrido el delito", explicó el abogado defensor, Rubén González Sierra, ayer, a la salida del juicio en la Sección Octava. El joven, nacido en 2020, contó con el testimonio a favor de su novia, su suegra y el novio de la madre de su pareja, que mantuvieron que hasta las dos de la mañana estuvo con ellos en la casa del Polígono. A partir de ahí, también verbalizaron, D. S. S. B. se fue a su casa, cuando pasaban cinco o diez minutos de las dos de la madrugada del 2 de febrero de 2019.

En contra de esta versión exculpatoria de mostraron ayer el Ministerio Fiscal -solicita dos años de cárcel, año y medio de alejamiento a más de 300 metros, y cinco años de libertad vigilada; así como el pago de 1.660 euros de indemnización- y la acusación particular, ejercida por la abogada Ana María González, del Centro de Asistencia a Víctimas de Agresiones Sexuales y Malos Tratos de Asturias (Cavasym), que pide tres años de cárcel y una indemnización de 3.000 euros. Ambas partes cuentan con el testimonio "coherente y creíble" que la víctima ha mantenido a lo largo del procedimiento.

Defensa personal

Defensa personalLa mujer afectada declaró en Comisaría que un joven la había abordado por la espalda al poco de salir de trabajar en el sector hostelero por la calle Espronceda, entre las 1.40 y 2.00 horas del 2 de febrero de 2019. Justo en ese momento, cuando ya estaba cerca de llegar a casa, su atacante la rodeó con los brazos por la zona de los pechos y la metió a la fuerza en un portal. Una vez dentro la puso contra la pared -ella sufrió una contusión occipital- y empezó a realizarle tocamientos por encima de la ropa. La mujer logró darle un golpe en la zona genital -tiene conocimientos de defensa personal- y escapar a la carrera de la zona.

Durante su denuncia en Comisaría, le exhibieron distintas fotografías para ver si reconocía a su agresor. Ya en ese momento, explica su abogada, Ana María González, de Cavasym, "reconoció sin género de dudas" al acusado. Poco después volvieron a citarla para que se ratificase en la identificación mediante una rueda de reconocimiento en la que también volvió a señalarle al momento entre varias personas. "Ya ese día se puso nerviosa nada más verle en la rueda de reconocimiento", valoró Ana María González.

La tercera que vez que la denunciante coincidió con el acusado fue ayer durante el juicio, aunque él no pudo verla. La víctima, que aguardó en otra sala distintas antes de entrar a declarar, relató su versión al tribunal detrás de un biombo. Se mantuvo en todo lo dicho desde el principio, relatando lo ocurrido aquella noche de forma pormenorizada, respondiendo a las preguntas de todas las partes, y volviendo a identificar al acusado como el joven que aquella madruga le asaltó con ánimo libidinoso.

La acusación particular, además, presentó un informe médico que avala que a la joven "le sigue quedando huella y está a tratamiento psicológico" desde la noche de la agresión.

En el juicio también declararon los agentes de la Policía Nacional que asistieron a la mujer al día siguiente de los hechos para tomarle declaración. Confirmaron que ella reconoció "sin género de dudas" al acusado en la fotografía que le exhibieron.

Cavasym

CavasymEn Asturias, varias asociaciones dan apoyo a mujeres víctimas de cualquier tipo de agresión, tanto física como psicológica o sexual. Una de ellas es el Centro de Atención a Víctimas de Agresiones Sexuales y Malos Tratos de Asturias (Cavasym), que lleva años dan apoyo psicológico y jurídico a las víctimas de estos episodios.